

Parecía una gira “maldita”, pero afortunadamente este pasado viernes 10 de febrero llegaron por fin a España y concretamente a Barcelona los holandeses Epica quienes liderados por la diosa del metal sinfónico Simone Simons venían a presentar su último disco The Alchemy Project y los finlandeses Apocalyptica, quienes siguen muy vigentes tras más de dos décadas de carrera y esa combinación tan acertada de metal moderno, toques sinfónicos y por supuesto ese juego de chelos que tan populares les ha hecho en su carrera.
Lo que quizás no estuvo tan acertado fue la elección de Wheel como banda invitada, si ya en disco la banda liderada por James Lascelles suena un poquito a Tool, Monuments, Leprosy, pero sin llegar al nivel de ninguno de ellos, su aporte al cartel esta noche en Barcelona fue prácticamente nulo, o sea si no hubiesen llegado, nadie se hubiese quejado y las dos bandas principales hubieran tocado entre 15 y 20 minutos más cada uno.
La banda apenas destacó, pero si podemos quedarnos con algún tema de su setlist, ese sería sin duda “Movement”, pero el resto se nos atragantó peor que el frío que ha estado haciendo estos días en nuestro país, sin duda no fue el mejor comienzo, pero por suerte en unos minutos más se empezaría a reconducir la noche.
A estas alturas del partido, no entendemos como Epica sigue tocando en salas grandes y no ha podido dar el salto a los pabellones que si ha dado Nightwish. Ojo, no estoy diciendo que la banda que lidera Floor Jansen no lo merezca, pero realmente que Simone y los suyos hace 10 años que no pasan de La Riviera y Razzmatazz, es algo que se me escapa.
Pese a todo, Simone y los suyos aprovecharon los 70 minutos justitos que estuvieron sobre las tablas para desplegar su espectacular directo y deleitarnos una vez más con una de las mejores voces que ha dado el metal o el rock en las últimas tres décadas, así de alto y claro te lo digo, Simone es una voz de esas que es imposible no amar y cuesta definir con palabras lo que te hace sentir cuando canta.
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Si no fijémonos en el comienzo cuando tras dos temas más recientes, Simone comienza a entonar las primeras notas del clásico “Unleashed” y la sala de viene literalmente abajo, la delicadeza que tiene esta mujer, la sitúan a 5 pasos de casi todas sus compañeras, aparte derrocha una personalidad que enseguida te hace reconocer un tema de Épica, aunque no sepas cual es, sabes que son ellos por el cristalino tono vocal de Simone.
Quizás la única pega fue que la banda tocó hasta cuatro canciones de Omega, su disco del año pasado, dejando en el tintero varios clásicos, pero al no ser cabezas de cartel al 100% si no compartiendo el mismo con Apocalyptica, entendemos que tenían que presentar canciones nuevas, que igualmente fueron celebradas por el gran público que allí se dio cita.
Eso sí, el final fue de ensueño, ya que la banda se despachó con un triplete mágico conformado por “Cry For The Moon”, una de las mejores canciones de metal sinfónico de todos los tiempos, la potente y más actual “Beyond the Matrix” y para finalizar “Consign To Oblivion”, dejando el nivel altísimo para sus compañeros finlandeses.
Épica pueden hacer sets más completos que este, pero teniendo en cuenta que “co lideraban” la gira y que febrero es un mes lleno de propuestas internacionales, haber congregado a 1200 almas aproximadamente y más en estos tiempos que corren, podemos decir que la banda cumplió y con notable alto esta nueva visita a Barcelona.
Apocalyptica por su parte, cumplieron una vez más con lo que más o menos podemos de esperar de ellos en un concierto, el cual de hecho estuvo dividido en dos etapas.
Una primera en donde pudimos escuchar “Hits” como “I’m Not Jesus” y “I Don’t Care”, donde colaboró el señor Frankie Peréz, que, si bien no es Corey Taylor ni tampoco Adam Gontier, sí que supo cumplir muy bien el papel vocal en ambas piezas y puso a toda la Razz a corear dichas canciones.
El sonido estuvo muy a su favor durante todo el tiempo que estuvieron en el escenario y a pesar de que World Collide, es el mejor disco de la banda al menos por las canciones que contiene, los fans querían escuchar sus impecables interpretaciones de clásicos del metal, pero con sus característicos chelos y eso justamente es lo que ofrecieron los finlandeses en la segunda parte del show.
En este caso hay que destacar la aplastante versión de “Territory”, de los míticos Sepultura (si no seáis pesados, en aquella época eran míticos y Chaos A.D es una obra de arte) y como no la delicada y emocionante versión de “Nothing Else Matters”, ¿La mejor versión instrumental de Metallica en tres décadas? , quien sabe, pero ellos desde luego la hicieron (casi) suya.
El final estuvo marcado por “Farewell” y la archi conocida “In The Hall of the Mountain King” popularizada por Edvard Grieg y bueno esto es lo que da de sí un concierto de Apocalyptica, no sé porque fueron ellos quienes cerraron la noche y no Épica, ya que pese a su encomiable esfuerzo no superaron para nada a Simone y compañía, pero si que nos han vuelto a demostrar que a su propuesta aún le queda mucha tela que cortar.


Parecía una gira “maldita”, pero afortunadamente este pasado viernes 10 de febrero llegaron por fin a España y concretamente a Barcelona los holandeses Epica quienes liderados por la diosa del metal sinfónico Simone Simons venían a presentar su último disco The Alchemy Project y los finlandeses Apocalyptica, quienes siguen muy vigentes tras más de dos décadas de carrera y esa combinación tan acertada de metal moderno, toques sinfónicos y por supuesto ese juego de chelos que tan populares les ha hecho en su carrera.
Lo que quizás no estuvo tan acertado fue la elección de Wheel como banda invitada, si ya en disco la banda liderada por James Lascelles suena un poquito a Tool, Monuments, Leprosy, pero sin llegar al nivel de ninguno de ellos, su aporte al cartel esta noche en Barcelona fue prácticamente nulo, o sea si no hubiesen llegado, nadie se hubiese quejado y las dos bandas principales hubieran tocado entre 15 y 20 minutos más cada uno.
La banda apenas destacó, pero si podemos quedarnos con algún tema de su setlist, ese sería sin duda “Movement”, pero el resto se nos atragantó peor que el frío que ha estado haciendo estos días en nuestro país, sin duda no fue el mejor comienzo, pero por suerte en unos minutos más se empezaría a reconducir la noche.
A estas alturas del partido, no entendemos como Epica sigue tocando en salas grandes y no ha podido dar el salto a los pabellones que si ha dado Nightwish. Ojo, no estoy diciendo que la banda que lidera Floor Jansen no lo merezca, pero realmente que Simone y los suyos hace 10 años que no pasan de La Riviera y Razzmatazz, es algo que se me escapa.
Pese a todo, Simone y los suyos aprovecharon los 70 minutos justitos que estuvieron sobre las tablas para desplegar su espectacular directo y deleitarnos una vez más con una de las mejores voces que ha dado el metal o el rock en las últimas tres décadas, así de alto y claro te lo digo, Simone es una voz de esas que es imposible no amar y cuesta definir con palabras lo que te hace sentir cuando canta.
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Si no fijémonos en el comienzo cuando tras dos temas más recientes, Simone comienza a entonar las primeras notas del clásico “Unleashed” y la sala de viene literalmente abajo, la delicadeza que tiene esta mujer, la sitúan a 5 pasos de casi todas sus compañeras, aparte derrocha una personalidad que enseguida te hace reconocer un tema de Épica, aunque no sepas cual es, sabes que son ellos por el cristalino tono vocal de Simone.
Quizás la única pega fue que la banda tocó hasta cuatro canciones de Omega, su disco del año pasado, dejando en el tintero varios clásicos, pero al no ser cabezas de cartel al 100% si no compartiendo el mismo con Apocalyptica, entendemos que tenían que presentar canciones nuevas, que igualmente fueron celebradas por el gran público que allí se dio cita.
Eso sí, el final fue de ensueño, ya que la banda se despachó con un triplete mágico conformado por “Cry For The Moon”, una de las mejores canciones de metal sinfónico de todos los tiempos, la potente y más actual “Beyond the Matrix” y para finalizar “Consign To Oblivion”, dejando el nivel altísimo para sus compañeros finlandeses.
Épica pueden hacer sets más completos que este, pero teniendo en cuenta que “co lideraban” la gira y que febrero es un mes lleno de propuestas internacionales, haber congregado a 1200 almas aproximadamente y más en estos tiempos que corren, podemos decir que la banda cumplió y con notable alto esta nueva visita a Barcelona.
Apocalyptica por su parte, cumplieron una vez más con lo que más o menos podemos de esperar de ellos en un concierto, el cual de hecho estuvo dividido en dos etapas.
Una primera en donde pudimos escuchar “Hits” como “I’m Not Jesus” y “I Don’t Care”, donde colaboró el señor Frankie Peréz, que, si bien no es Corey Taylor ni tampoco Adam Gontier, sí que supo cumplir muy bien el papel vocal en ambas piezas y puso a toda la Razz a corear dichas canciones.
El sonido estuvo muy a su favor durante todo el tiempo que estuvieron en el escenario y a pesar de que World Collide, es el mejor disco de la banda al menos por las canciones que contiene, los fans querían escuchar sus impecables interpretaciones de clásicos del metal, pero con sus característicos chelos y eso justamente es lo que ofrecieron los finlandeses en la segunda parte del show.
En este caso hay que destacar la aplastante versión de “Territory”, de los míticos Sepultura (si no seáis pesados, en aquella época eran míticos y Chaos A.D es una obra de arte) y como no la delicada y emocionante versión de “Nothing Else Matters”, ¿La mejor versión instrumental de Metallica en tres décadas? , quien sabe, pero ellos desde luego la hicieron (casi) suya.
El final estuvo marcado por “Farewell” y la archi conocida “In The Hall of the Mountain King” popularizada por Edvard Grieg y bueno esto es lo que da de sí un concierto de Apocalyptica, no sé porque fueron ellos quienes cerraron la noche y no Épica, ya que pese a su encomiable esfuerzo no superaron para nada a Simone y compañía, pero si que nos han vuelto a demostrar que a su propuesta aún le queda mucha tela que cortar.