

Tarde noche de sábado 27 de abril y cita con toda una institución del death metal mundial. Una gira con 4 bandazas, encabezada por los británicos Ingested y completada por una lista multinacional que incluía a los australianos Mélancolia, a los sudafricanos Vulvodynia y a los estadounidenses Fallujah. Una sala Moby Dick, bastante pequeña para bandas del porte, sin telón, escenario donde casi no entraban los integrantes y sin foso, Pero a pesar de esto, supieron dar un gran show todas las bandas, bastante íntimo, lo cual fue agradable ver a los músicos armando y desarmando en crudo como si no fueran inminencias del metal extremo mundial. Destaco la organización de Madness Live por su puntualidad y orden.
Puntuales, exactamente a las 18.59, Mélancolia salieron a escena. Esta banda, fusión de black y deathcore melódico, dio que hablar con su presentación. Entre pinturas, vestimentas excéntricas y una performance hasta con escupitajos, debo decir que en lo personal me gusto mucho y quedé sorprendida.
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Momentos después era el turno de los sudafricanos Vulvodynia para dar su toque visceral y brutal. Quienes actuaban sin su formación original. Sin problema alguno, subieron dos invitados a acompañarles en la voz. El primero Josh Davies de Your Malice, y luego, Billy de Mélancolia.
Nuevamente entre bajadas y subidas, armados y desarmados en crudo, pudimos ver como el batero de tour, Kevin Alexander de Fallujah, dejaba atrás los anticuados bombos para utilizar 2 pedales con trigger digitales. La primera vez que veía algo así en vivo. La mítica banda estadounidense ha perfeccionado su tecnicismo y entiendo que para lograr su sonido de technical death metal ha requerido dicha innovación, Muy a la altura del show tocaron temas icónicos y algunos de su último álbum “Empyrean”
A las 21.45 saldrían a escena entre tinieblas los británicos Ingested, arrancando con la brutal y densa “Paragon of Purity” y siguieron con “Pantheon”, ambas de “The tide of death and fractured dreams”, álbum que habían venido a presentar y que continúa con su legado innovador, técnico y brutal que la caracteriza.
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A partir de ahí, comenzarían a repasar su discografía anterior, eligiendo de manera muy cuidadosa canciones como “Skinned and Fucked” de Surpassing the Boundaries of Human Suffering, “The Divine Right of Kings” de The Architect of Extinction e “Impending Dominance” de Where Only Gods May Tread. Fue un setlist muy corto de apenas diez canciones, pero el único álbum que se quedaría afuera de este setlist sería The Surreption, lo cual tiene sentido siendo el más divisivo y polémico de toda su discografía.
El sonido de disco de Ingested es realmente nítido y pulcro, por lo cual podemos entender que en un antro pequeño no se aprecie el sonido demoledor que acompaña a la banda desde sus inicios. De todas maneras, fue una jornada muy íntima y satisfactoria, donde los ingleses lograron trasladar al máximo todo lo hecho en los álbumes, tanto en la brutalidad de los riffs como en los rugidos de Jason Evans.


Tarde noche de sábado 27 de abril y cita con toda una institución del death metal mundial. Una gira con 4 bandazas, encabezada por los británicos Ingested y completada por una lista multinacional que incluía a los australianos Mélancolia, a los sudafricanos Vulvodynia y a los estadounidenses Fallujah. Una sala Moby Dick, bastante pequeña para bandas del porte, sin telón, escenario donde casi no entraban los integrantes y sin foso, Pero a pesar de esto, supieron dar un gran show todas las bandas, bastante íntimo, lo cual fue agradable ver a los músicos armando y desarmando en crudo como si no fueran inminencias del metal extremo mundial. Destaco la organización de Madness Live por su puntualidad y orden.
Puntuales, exactamente a las 18.59, Mélancolia salieron a escena. Esta banda, fusión de black y deathcore melódico, dio que hablar con su presentación. Entre pinturas, vestimentas excéntricas y una performance hasta con escupitajos, debo decir que en lo personal me gusto mucho y quedé sorprendida.
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Nuevamente entre bajadas y subidas, armados y desarmados en crudo, pudimos ver como el batero de tour, Kevin Alexander de Fallujah, dejaba atrás los anticuados bombos para utilizar 2 pedales con trigger digitales. La primera vez que veía algo así en vivo. La mítica banda estadounidense ha perfeccionado su tecnicismo y entiendo que para lograr su sonido de technical death metal ha requerido dicha innovación, Muy a la altura del show tocaron temas icónicos y algunos de su último álbum “Empyrean”
A las 21.45 saldrían a escena entre tinieblas los británicos Ingested, arrancando con la brutal y densa “Paragon of Purity” y siguieron con “Pantheon”, ambas de “The tide of death and fractured dreams”, álbum que habían venido a presentar y que continúa con su legado innovador, técnico y brutal que la caracteriza.
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El sonido de disco de Ingested es realmente nítido y pulcro, por lo cual podemos entender que en un antro pequeño no se aprecie el sonido demoledor que acompaña a la banda desde sus inicios. De todas maneras, fue una jornada muy íntima y satisfactoria, donde los ingleses lograron trasladar al máximo todo lo hecho en los álbumes, tanto en la brutalidad de los riffs como en los rugidos de Jason Evans.