Redes Sociales:

Redes Sociales:

NOTICIAS / AGENDA / CRONICAS / ENTREVISTAS / RESEÑAS / ESPECIALES / CONTACTO
Exodus en Buenos Aires: “Armas de Destrucción Masiva”

Exodus en Buenos Aires: “Armas de Destrucción Masiva”

Foto de Portada: Facundo Rodríguez (Shots by Far) Cuarenta años de Bonded by Blood se celebraron en Buenos Aires con la intensidad que solo el thrash metal puede ofrecer. Los […]

Lagwagon en Buenos Aires: “Buena onda punk”

Lagwagon en Buenos Aires: “Buena onda punk”

Fotos cortesía de Seba Pintos El punk rock ya de por sí es un estilo al que se suele relacionar con una energía juvenil particular, pero esto se incrementa todavía […]

Kadavar en Barcelona: “Distorsión y éxtasis”

Kadavar en Barcelona: “Distorsión y éxtasis”

La sala, vestida de luto rockero y rumor metálico, era el recipiente perfecto para una noche que prometía ser un tratado vivo sobre la anatomía del rock pesado. Tres bandas, […]

Dynazty en Madrid: “potencia sueca”

Dynazty en Madrid: “potencia sueca”

Madrid se convirtió en la última parada del paso otoñal de Dynazty por España, y la banda sueca no podía haber cerrado de mejor manera una minigira que ha colgado […]

Horcas en Buenos Aires: “El diablo metió la cola”

Horcas en Buenos Aires: “El diablo metió la cola”

Foto de Portada: Facundo Rodríguez (Shots by Far) Tremendo lo vivido el pasado sábado 11 de Octubre en El Teatro de Flores. Después de tanto esperar finalmente llegó el día […]

All Them Witches en Copenhague: “Stoner, blues y trance”

All Them Witches en Copenhague: “Stoner, blues y trance”

Una noche gélida de casi invierno en Copenhague encontró refugio en el calor eléctrico de Amager Bio. En esa sala, con su historia de conciertos legendarios y su acústica impecable, […]

5150 Festival 2025 en Buenos Aires: “Que el rock nunca muera”

5150 Festival 2025 en Buenos Aires: “Que el rock nunca muera”

Es increíble pensar en el paso del tiempo, y ver como nuestra percepción de este, a veces suele ser totalmente opuesta. Muchas veces cuando uno está en el trabajo, siente […]

Annisokay en Copenhague: “Una noche de intensidad metalcore”

Annisokay en Copenhague: “Una noche de intensidad metalcore”

Cuando las puertas del Pumpehuset abrieron a las 19:00 la nohe del jueves 16/10, la expectación era palpable. El icónico recinto de Copenhague, conocido por albergar a algunos de los […]

Sonicblast 2025 Día 3: “Cuando el ruido cura”

Sonicblast 2025 Día 3: “Cuando el ruido cura”

El sábado era uno de los días que más esperábamos, no solo por Molchat Doma como cabezas de cartel, sino porque había mucho mix de estilos y todo apuntaba a […]

God Is An Astronaut en Barcelona: “viaje sonoro más allá del tiempo”

God Is An Astronaut en Barcelona: “viaje sonoro más allá del tiempo”

Llegué temprano a la sala. La expectación por God Is An Astronaut se palpaba en el aire, pero antes, el plato fuerte era la incomparable Jo Quail. Ver a una […]


Iron Maiden en Madrid: “La Invencible Doncella Que Desafía el Tiempo”
thumb image

El Estadio Metropolitano de Madrid acogió a Iron Maiden, la formación británica que ha cimentado el heavy metal, en un concierto espectacular bajo el calor de la capital y ante un estadio repleto.

Antes telonearon Avatar para los madrugadores. La banda lo dio todo sobre el escenario dejando muestras de su capacidad musical e interpretativa. Las miradas de todos se fueron con su frontman capaz de hipnotizarnos con su desparpajo y sin fin de poses. Deseoso de verlos con más tiempo y mejores luces fueron un buen inicio de noche.

Iron Maiden, una de las agrupaciones fundamentales del heavy metal, se formó en 1975 en Leyton, East London, Inglaterra. Se les considera pioneros y figuras centrales de la New Wave of British Heavy Metal (NWOBHM). Su estilo incorpora elementos de Power Metal, evidentes en su enfoque épico y narrativo, y en menor medida, de Progressive Metal, particularmente en álbumes posteriores con estructuras de canciones más complejas.

La puesta en escena del concierto exhibió un diseño meticuloso. Al inicio, la luz natural del atardecer atenuó la iluminación escénica, pero al caer la noche, el despliegue lumínico reveló su propósito: una sólida carga ambiental complementada por cañones de luz que focalizaban la atención en Bruce Dickinson o en momentos concretos como los solos de guitarra. La programación luminosa acompañó cada arranque temático, reforzando la narrativa musical. La pirotecnia y el humo, elementos que a menudo devienen en artificio, se integraron con una función narrativa, impulsando o rematando pasajes clave sin perturbar la visibilidad. Los visuales, de un nivel técnico elevado en renderizado, partículas y texturas, junto con una postproducción de color e iluminación que compite con producciones contemporáneas, complementaron un escenario de aparente simplicidad que, en conjunto con los himnos interpretados, generó un resultado de primer nivel.

TAMBIEN TE PUEDE INTERESAR: Iron Maiden en Glasgow: 50 años no son nada

El sonido en un recinto de gran envergadura, sujeto a factores como el viento y la dispersión, se mantuvo en niveles aceptables. El volumen resultó elevado, pero sin romper ni generar distorsiones. La voz de Dickinson emergió con claridad sobre la instrumentación, mientras que el bajo y la batería, aunque presentes, lo hicieron con una menor distinción individual. Las guitarras, en la mayor parte del repertorio, se percibieron como un bloque sonoro cohesionado, salvo en pasajes puntuales que permitieron diferenciar sus contribuciones individuales.

La armonía de Iron Maiden es predominantemente tonal y modal, utilizando escalas mayores y menores e incorporando modos como el frigio o el eólico para crear atmósferas épicas o melancólicas. Las melodías son un sello distintivo, tanto en la voz de Bruce Dickinson como en las icónicas “Twin Guitars” de Dave Murray, Adrian Smith y Janick Gers, que crean líneas melódicas pegadizas y narrativas, una característica fundamental del grupo. El ritmo es potente y propulsivo, con el bajo y la batería proporcionando una base sólida.

La banda en el escenario manifestó una vitalidad que desdice su dilatada trayectoria. Bruce Dickinson, un frontman incansable, ofreció un espectáculo constante de carisma, con gestos característicos como el lanzamiento del pie de micrófono. Janick Gers, con sus acrobacias y lanzamientos de guitarra, desafió la comprensión sobre cómo mantiene su precisión instrumental; su entrega durante todo el concierto fue notable. El esfuerzo colectivo de la banda por generar aplausos y ovaciones, incluso ante un público ya entregado, evidenció su compromiso.

La ejecución musical a lo largo de las dos horas y media de concierto fue precisa y contundente. La banda mantuvo un nivel constante, reproduciendo sus composiciones con exactitud. Solo se registraron dos pausas breves, destinadas a los solos de guitarra y al merecido descanso para los miembros restantes. El escenario permaneció ocupado de manera continua, con la única interrupción del encore.

Es pertinente profundizar en la voz de Bruce Dickinson. Su timbre es potente y resonante, capaz de traspasar la densa instrumentación de la banda. En sus inicios, su voz presentaba un timbre brillante y una cualidad metálica o “chillona”. A pesar de su potencia, su voz es melódica, transmitiendo una amplia gama de emociones. Es versátil, pudiendo transitar de un sonido áspero a una voz limpia y operística con fluidez. Con el paso del tiempo, su timbre ha adquirido una cualidad más pesada y oscura, permitiendo una mayor profundidad emocional; la cercanía en el directo multiplica este efecto, haciendo de su capacidad musical un aspecto espectacular.

El estilo interpretativo de Dickinson, teatral y dramático, utiliza su voz como narrador, infundiendo intención y emoción en cada frase, ya sea la furia de la batalla o la melancolía de la pérdida. En canciones rápidas, su voz se vuelve agresiva y enérgica. También es capaz de transmitir vulnerabilidad e introspección en las baladas o secciones más lentas. Su fraseo es rítmico y dinámico, a menudo complementando las intrincadas líneas de guitarra. Todo ello, en conjunto, multiplica la conexión profunda con la audiencia.

TAMBIEN TE PUEDE INTERESAR: Back to the Beginning: El último acto sagrado de los dioses del metal

El setlist se compuso de himnos de la discografía de la banda, con un orden y unas intros escénicas de alto nivel. La inclusión de “Doctor Doctor” de UFO como intro instrumental desencadenó una respuesta inmediata del público; los fotógrafos captaron las expresiones de júbilo en las primeras filas. “The Ides of March” anticipó la entrada de la banda con una celebración colectiva, y el arranque de “Murders in the Rue Morgue” provocó una ovación ensordecedora, pocas veces escuchada. Las dos apariciones de Eddie, más imponentes que nunca, desataron el entusiasmo general.

Cada cambio de pantalla, con sus visuales, luces, humo y pirotecnia ajustados, fue notorio, destacando los de “Seventh Son Of A Seventh Son“, el segmento teatral de “Hallowed Be Thy Name” y “Aces High“. Mención especial merece “Rime of the Ancient Mariner“. “Run to the Hills” y “Fear of the Dark” fueron particularmente coreadas, aunque la intensidad del público no decayó en ningún momento. Las celebraciones entre asistentes y los bailes cargados de emoción fueron una constante.

El ambiente general fue de fiesta, con tres generaciones disfrutando de una banda histórica. El calor, aunque presente, no resultó sofocante. El estadio, con pista y gradas abarrotadas, ofrecía un espectáculo visual impactante. Banderas de varios países, grupos de amigos, parejas y cientos de camisetas de la banda formaban una marea negra. Si bien destaco los aspectos positivos, es necesario señalar una observación: en más de cien conciertos presenciados este año, no había sido testigo de una sola confrontación; sin embargo, en el Metropolitano se registraron cuatro peleas, además de tres personas expulsadas de la pista por mal comportamiento. Aunque se comprende que para muchos metaleros que no frecuentan salas este sea un evento de gran magnitud, la responsabilidad de disfrutar con mesura y saber estar, a pesar del calor y el consumo de cerveza, recae en todos los asistentes.

Debería ser obligatoria una visita anual de Iron Maiden mientras la banda así lo decida. Existe la certeza de que casi todos repetirían una noche tan memorable como la vivida, repleta de temas históricos e himnos del metal. La edad del grupo no parece corresponder con su vitalidad, su entrega es innegociable y su ejecución, de alto nivel. Dejan el listón muy alto y una huella profunda en el recuerdo de todos.

Etiquetas: , , , , , , , , , ,

Iron Maiden en Madrid: “La Invencible Doncella Que Desafía el Tiempo”
thumb image

El Estadio Metropolitano de Madrid acogió a Iron Maiden, la formación británica que ha cimentado el heavy metal, en un concierto espectacular bajo el calor de la capital y ante un estadio repleto.

Antes telonearon Avatar para los madrugadores. La banda lo dio todo sobre el escenario dejando muestras de su capacidad musical e interpretativa. Las miradas de todos se fueron con su frontman capaz de hipnotizarnos con su desparpajo y sin fin de poses. Deseoso de verlos con más tiempo y mejores luces fueron un buen inicio de noche.

Iron Maiden, una de las agrupaciones fundamentales del heavy metal, se formó en 1975 en Leyton, East London, Inglaterra. Se les considera pioneros y figuras centrales de la New Wave of British Heavy Metal (NWOBHM). Su estilo incorpora elementos de Power Metal, evidentes en su enfoque épico y narrativo, y en menor medida, de Progressive Metal, particularmente en álbumes posteriores con estructuras de canciones más complejas.

La puesta en escena del concierto exhibió un diseño meticuloso. Al inicio, la luz natural del atardecer atenuó la iluminación escénica, pero al caer la noche, el despliegue lumínico reveló su propósito: una sólida carga ambiental complementada por cañones de luz que focalizaban la atención en Bruce Dickinson o en momentos concretos como los solos de guitarra. La programación luminosa acompañó cada arranque temático, reforzando la narrativa musical. La pirotecnia y el humo, elementos que a menudo devienen en artificio, se integraron con una función narrativa, impulsando o rematando pasajes clave sin perturbar la visibilidad. Los visuales, de un nivel técnico elevado en renderizado, partículas y texturas, junto con una postproducción de color e iluminación que compite con producciones contemporáneas, complementaron un escenario de aparente simplicidad que, en conjunto con los himnos interpretados, generó un resultado de primer nivel.

TAMBIEN TE PUEDE INTERESAR: Iron Maiden en Glasgow: 50 años no son nada

El sonido en un recinto de gran envergadura, sujeto a factores como el viento y la dispersión, se mantuvo en niveles aceptables. El volumen resultó elevado, pero sin romper ni generar distorsiones. La voz de Dickinson emergió con claridad sobre la instrumentación, mientras que el bajo y la batería, aunque presentes, lo hicieron con una menor distinción individual. Las guitarras, en la mayor parte del repertorio, se percibieron como un bloque sonoro cohesionado, salvo en pasajes puntuales que permitieron diferenciar sus contribuciones individuales.

La armonía de Iron Maiden es predominantemente tonal y modal, utilizando escalas mayores y menores e incorporando modos como el frigio o el eólico para crear atmósferas épicas o melancólicas. Las melodías son un sello distintivo, tanto en la voz de Bruce Dickinson como en las icónicas “Twin Guitars” de Dave Murray, Adrian Smith y Janick Gers, que crean líneas melódicas pegadizas y narrativas, una característica fundamental del grupo. El ritmo es potente y propulsivo, con el bajo y la batería proporcionando una base sólida.

La banda en el escenario manifestó una vitalidad que desdice su dilatada trayectoria. Bruce Dickinson, un frontman incansable, ofreció un espectáculo constante de carisma, con gestos característicos como el lanzamiento del pie de micrófono. Janick Gers, con sus acrobacias y lanzamientos de guitarra, desafió la comprensión sobre cómo mantiene su precisión instrumental; su entrega durante todo el concierto fue notable. El esfuerzo colectivo de la banda por generar aplausos y ovaciones, incluso ante un público ya entregado, evidenció su compromiso.

La ejecución musical a lo largo de las dos horas y media de concierto fue precisa y contundente. La banda mantuvo un nivel constante, reproduciendo sus composiciones con exactitud. Solo se registraron dos pausas breves, destinadas a los solos de guitarra y al merecido descanso para los miembros restantes. El escenario permaneció ocupado de manera continua, con la única interrupción del encore.

Es pertinente profundizar en la voz de Bruce Dickinson. Su timbre es potente y resonante, capaz de traspasar la densa instrumentación de la banda. En sus inicios, su voz presentaba un timbre brillante y una cualidad metálica o “chillona”. A pesar de su potencia, su voz es melódica, transmitiendo una amplia gama de emociones. Es versátil, pudiendo transitar de un sonido áspero a una voz limpia y operística con fluidez. Con el paso del tiempo, su timbre ha adquirido una cualidad más pesada y oscura, permitiendo una mayor profundidad emocional; la cercanía en el directo multiplica este efecto, haciendo de su capacidad musical un aspecto espectacular.

El estilo interpretativo de Dickinson, teatral y dramático, utiliza su voz como narrador, infundiendo intención y emoción en cada frase, ya sea la furia de la batalla o la melancolía de la pérdida. En canciones rápidas, su voz se vuelve agresiva y enérgica. También es capaz de transmitir vulnerabilidad e introspección en las baladas o secciones más lentas. Su fraseo es rítmico y dinámico, a menudo complementando las intrincadas líneas de guitarra. Todo ello, en conjunto, multiplica la conexión profunda con la audiencia.

TAMBIEN TE PUEDE INTERESAR: Back to the Beginning: El último acto sagrado de los dioses del metal

El setlist se compuso de himnos de la discografía de la banda, con un orden y unas intros escénicas de alto nivel. La inclusión de “Doctor Doctor” de UFO como intro instrumental desencadenó una respuesta inmediata del público; los fotógrafos captaron las expresiones de júbilo en las primeras filas. “The Ides of March” anticipó la entrada de la banda con una celebración colectiva, y el arranque de “Murders in the Rue Morgue” provocó una ovación ensordecedora, pocas veces escuchada. Las dos apariciones de Eddie, más imponentes que nunca, desataron el entusiasmo general.

Cada cambio de pantalla, con sus visuales, luces, humo y pirotecnia ajustados, fue notorio, destacando los de “Seventh Son Of A Seventh Son“, el segmento teatral de “Hallowed Be Thy Name” y “Aces High“. Mención especial merece “Rime of the Ancient Mariner“. “Run to the Hills” y “Fear of the Dark” fueron particularmente coreadas, aunque la intensidad del público no decayó en ningún momento. Las celebraciones entre asistentes y los bailes cargados de emoción fueron una constante.

El ambiente general fue de fiesta, con tres generaciones disfrutando de una banda histórica. El calor, aunque presente, no resultó sofocante. El estadio, con pista y gradas abarrotadas, ofrecía un espectáculo visual impactante. Banderas de varios países, grupos de amigos, parejas y cientos de camisetas de la banda formaban una marea negra. Si bien destaco los aspectos positivos, es necesario señalar una observación: en más de cien conciertos presenciados este año, no había sido testigo de una sola confrontación; sin embargo, en el Metropolitano se registraron cuatro peleas, además de tres personas expulsadas de la pista por mal comportamiento. Aunque se comprende que para muchos metaleros que no frecuentan salas este sea un evento de gran magnitud, la responsabilidad de disfrutar con mesura y saber estar, a pesar del calor y el consumo de cerveza, recae en todos los asistentes.

Debería ser obligatoria una visita anual de Iron Maiden mientras la banda así lo decida. Existe la certeza de que casi todos repetirían una noche tan memorable como la vivida, repleta de temas históricos e himnos del metal. La edad del grupo no parece corresponder con su vitalidad, su entrega es innegociable y su ejecución, de alto nivel. Dejan el listón muy alto y una huella profunda en el recuerdo de todos.

Etiquetas: , , , , , , , , , ,

thumb image
Asspera
Crónica De Una Verga Anunciada (2025)
thumb image
Revocation
New Gods, New Monsters (2025)
thumb image
Epica
Aspiral (2025)
thumb image
Biohazard
Divided We Fall (2025)

 

 



thumb image
Asspera
Crónica De Una Verga Anunciada (2025)
thumb image
Revocation
New Gods, New Monsters (2025)
thumb image
Epica
Aspiral (2025)
thumb image
Biohazard
Divided We Fall (2025)