Noctambulist es un quinteto de los Países Bajos que este año debutó con un excelente primer disco Noctambulist I: Elegieën y varios planes para seguir difundiendo su Post-Black Metal en tiempos de pandemia. La banda está integrada por J.D. Kaye (voz y guitarra), Stef Heesakkers (guitarra), Tristan Tabbers (guitarra), Sam C.A (bajo y voz) y Mitchell Scheerder (batería). Tras agradecerles la posibilidad de entrevistarlos, ellos optaron por responder como grupo, salvo en un par de ocasiones, en las que contestó J.D. Kaye.
-Realmente quiero hablar sobre “Noctambulist I: Elegieën” -un gran disco que tuve la posibilidad de reseñar- pero no sin antes saber más sobre la banda. Por empezar, quería confirmar si es su primer trabajo, y conocer más acerca de su historia como grupo. ¿Cuándo y cómo se formó?
N: Es nuestro primer trabajo. La banda se formó en 2016, con cuatro integrantes, más otro guitarrista que ya no está. Cuando él se fue, todavía nos encontrábamos en la búsqueda de nuestro sonido y componiendo lo se convertiría en “Noctambulist I: Elegieën”. Dos canciones de aquella época, “De Leegte Wenkt” (mayormente escrita por él) y “Vreugd”, finalmente quedaron en el disco. Cuando Stef se nos unió, agregamos “Klatergoud” y cuando se incorporó Tristan, terminamos el álbum, que estuvo guardado por casi dos años, a falta de un sello que lo editara.
-Ahora, hablemos del disco. ¿Cómo fue el proceso de hacerlo? ¿Qué buscaban en cuanto a sonido?
N: El sonido evolucionó durante el proceso de composición y realmente se vio impulsado cuando se nos unió Tristan. Todos tenemos diferentes influencias, pero teníamos un mismo propósito en mente. El disco tenía que movilizar a la gente; queríamos pintar con contrastes y creo que conseguimos hacerlo. Amamos el Post-Rock y el Black Metal, pero nos encontramos con que ambos géneros se volvieron rígidos con el tiempo. El tira y afloje que ocurre cuando se combinan esos estilos, a la vez que se suma un poco de Shoegaze, Post-Punk e incluso New Wave, fue lo que nos brindó más opciones a la hora de componer.
-Justamente, todos sabemos que el uso de categorías para etiquetar los estilos musicales siempre es problemático, pero, ¿cuál es el que se ajusta mejor a la música que ustedes hacen?
N: Nos encanta el término “Black Metal Hipster” porque es despectivo, y cualquiera que lo use en serio, no forma parte de la audiencia que deseamos: “elitista” a su manera. Más recientemente, se suele usar la expresión “Blackgaze”, pero, si bien entendemos su utilización, nos asimila a bandas como Alcest o Amesoeurs, por lo que creemos que Post-Black Metal Atmosférico, si bien es largo, sería el término más adecuado que encontramos por ahí.
-Algo que me gustó mucho de su disco es que es bastante impredecible, es decir, incorporan tantas texturas y climas que suenan “extraños” en una escena donde cada vez más bandas pretenden sonar como Mgla, o siguen buscando “recrear” el sonido de lo que algunos llaman “norsecore”. Creo que lograron un estilo propio, ¿qué opinás al respecto?
N: La verdad, no tenemos idea de lo que sería “norsecore”, y aunque disfrutamos de las bandas más extremas de Black Metal underground, nunca sentimos que quisiéramos ser parte de eso. Somos personas bastante diversas, tanto en cuanto a gustos musicales, como a nuestras vidas cotidianas. Queremos apelar a una audiencia amplia, sin comprometer la integridad del sonido que nos representa. Y en cuanto a lo impredecible, esperen escuchar “Noctambulist II”.
-Algo ya mencionaron, pero ¿cuáles son sus influencias?, porque más allá del Post-Punk o el Post-Rock, percibo ecos del estilo de algunos guitarristas contemporáneos solistas.
N: El de las influencias es un asunto bastante impreciso incluso para nosotros mismos, porque hay mucha variedad interna en la banda. Por ejemplo, a todos nos gustan los mismos géneros, pero grupos totalmente diferentes. Al principio, queríamos tocar Black Metal Atmosférico en la veta de Winterfylleth y Agalloch, pero se fueron colando demasiados elementos. En cuanto a la referencia a guitarristas contemporáneos, en verdad, no hay ninguno que se nos venga a la mente.
-La formación de la banda es interesante porque tienen tres guitarras. ¿A qué se debe esa decisión?
J.D: De alguna manera, simplemente sucedió. No había un plan de antemano de tocar con tres guitarristas cuando empezamos, pero un día le preguntamos a Tristan si estaba interesado en unírsenos, al otro día lo consulté con la banda, y un mes después éramos un grupo con cinco integrantes y compusimos “Vagevuur”. Tener tres guitarristas amplía las posibilidades, pero también requiere cierta restricción. Tendemos a enfocarnos mucho en las texturas y las capas. Algunos detalles pueden ser difíciles de distinguir, pero son parte integral del sonido y se notaría su falta si no estuvieran.
-También pensaba en la elección del idioma, el contenido de las letras y su rol en la música que hacen, considerando lo emotiva y diversa que es.
J.D.: Pasar del inglés al holandés tampoco fue algo planificado. Al tratar de cantar “Vreugd” tal como era ni bien empezamos, simplemente no funcionaba. Yo tenía un poema escrito en mi teléfono y lo improvisé sobre la canción. Esa es la letra que quedó grabada. No me agradaba la idea de alternar entre el inglés y el holandés, así que decidimos usar solamente el holandés. Escribir en mi propio idioma me resulta incómodo y extraño, y por eso lo prefiero; es una manera más despojada y sincera de expresarme. En cuanto a la temática, no es un álbum feliz. Muchas de las letras reflejan la depresión, el comportamiento obsesivo, cierto destello de sanación. Dado que llevó un tiempo que el disco saliera, las letras representan un compilado de cinco años de porquería para mí, algo sobre lo que puedo reflexionar ahora que estoy en un lugar mucho mejor.
-Están próximos a realizar un concierto gratuito por live stream (sábado 27/03). Pude ver el que grabaron el año pasado (“The Isolation Sessions”) y lo disfruté mucho. ¿Qué podemos esperar del que se viene y cómo los afectó la pandemia como banda?
N: Para ser honestos, el show será muy similar al que viste. Debido a las estrictas leyes que hay en nuestro país en relación con la pandemia, no hemos podido ensayar por un largo tiempo, así que era imposible que pudiéramos incluir material nuevo, aunque hay mucho. Editar un disco en medio de una crisis global tampoco es lo ideal, porque no tuvimos la posibilidad de promocionarlo sobre el escenario, tal como lo hubiésemos querido. Habiendo dicho eso, estamos gratamente sorprendidos por la respuesta que tuvimos hasta el momento, nos hace pensar en cuánto más podríamos haber logrado con la oportunidad de tocar en vivo frecuentemente. Pero no todo es malo; pudimos componer mucho y deseamos componer más y volver al estudio. También hay planes para grabar un EP, algo que nos encantaría poder hacer este año. “Elegieën” tardó cuatro años en salir, y no vamos a volver a pasar por eso, así que esperen más de nuestra música en un futuro cercano.
-¿Hay algo que quisieran decirle a la gente en América Latina y España que todavía no escuchó a la banda?
N: Escuchen el disco: en el peor de los casos habrán desperdiciado algunos minutos de su aislamiento.
Noctambulist es un quinteto de los Países Bajos que este año debutó con un excelente primer disco Noctambulist I: Elegieën y varios planes para seguir difundiendo su Post-Black Metal en tiempos de pandemia. La banda está integrada por J.D. Kaye (voz y guitarra), Stef Heesakkers (guitarra), Tristan Tabbers (guitarra), Sam C.A (bajo y voz) y Mitchell Scheerder (batería). Tras agradecerles la posibilidad de entrevistarlos, ellos optaron por responder como grupo, salvo en un par de ocasiones, en las que contestó J.D. Kaye.
-Realmente quiero hablar sobre “Noctambulist I: Elegieën” -un gran disco que tuve la posibilidad de reseñar- pero no sin antes saber más sobre la banda. Por empezar, quería confirmar si es su primer trabajo, y conocer más acerca de su historia como grupo. ¿Cuándo y cómo se formó?
N: Es nuestro primer trabajo. La banda se formó en 2016, con cuatro integrantes, más otro guitarrista que ya no está. Cuando él se fue, todavía nos encontrábamos en la búsqueda de nuestro sonido y componiendo lo se convertiría en “Noctambulist I: Elegieën”. Dos canciones de aquella época, “De Leegte Wenkt” (mayormente escrita por él) y “Vreugd”, finalmente quedaron en el disco. Cuando Stef se nos unió, agregamos “Klatergoud” y cuando se incorporó Tristan, terminamos el álbum, que estuvo guardado por casi dos años, a falta de un sello que lo editara.
-Ahora, hablemos del disco. ¿Cómo fue el proceso de hacerlo? ¿Qué buscaban en cuanto a sonido?
N: El sonido evolucionó durante el proceso de composición y realmente se vio impulsado cuando se nos unió Tristan. Todos tenemos diferentes influencias, pero teníamos un mismo propósito en mente. El disco tenía que movilizar a la gente; queríamos pintar con contrastes y creo que conseguimos hacerlo. Amamos el Post-Rock y el Black Metal, pero nos encontramos con que ambos géneros se volvieron rígidos con el tiempo. El tira y afloje que ocurre cuando se combinan esos estilos, a la vez que se suma un poco de Shoegaze, Post-Punk e incluso New Wave, fue lo que nos brindó más opciones a la hora de componer.
-Justamente, todos sabemos que el uso de categorías para etiquetar los estilos musicales siempre es problemático, pero, ¿cuál es el que se ajusta mejor a la música que ustedes hacen?
N: Nos encanta el término “Black Metal Hipster” porque es despectivo, y cualquiera que lo use en serio, no forma parte de la audiencia que deseamos: “elitista” a su manera. Más recientemente, se suele usar la expresión “Blackgaze”, pero, si bien entendemos su utilización, nos asimila a bandas como Alcest o Amesoeurs, por lo que creemos que Post-Black Metal Atmosférico, si bien es largo, sería el término más adecuado que encontramos por ahí.
-Algo que me gustó mucho de su disco es que es bastante impredecible, es decir, incorporan tantas texturas y climas que suenan “extraños” en una escena donde cada vez más bandas pretenden sonar como Mgla, o siguen buscando “recrear” el sonido de lo que algunos llaman “norsecore”. Creo que lograron un estilo propio, ¿qué opinás al respecto?
N: La verdad, no tenemos idea de lo que sería “norsecore”, y aunque disfrutamos de las bandas más extremas de Black Metal underground, nunca sentimos que quisiéramos ser parte de eso. Somos personas bastante diversas, tanto en cuanto a gustos musicales, como a nuestras vidas cotidianas. Queremos apelar a una audiencia amplia, sin comprometer la integridad del sonido que nos representa. Y en cuanto a lo impredecible, esperen escuchar “Noctambulist II”.
-Algo ya mencionaron, pero ¿cuáles son sus influencias?, porque más allá del Post-Punk o el Post-Rock, percibo ecos del estilo de algunos guitarristas contemporáneos solistas.
N: El de las influencias es un asunto bastante impreciso incluso para nosotros mismos, porque hay mucha variedad interna en la banda. Por ejemplo, a todos nos gustan los mismos géneros, pero grupos totalmente diferentes. Al principio, queríamos tocar Black Metal Atmosférico en la veta de Winterfylleth y Agalloch, pero se fueron colando demasiados elementos. En cuanto a la referencia a guitarristas contemporáneos, en verdad, no hay ninguno que se nos venga a la mente.
-La formación de la banda es interesante porque tienen tres guitarras. ¿A qué se debe esa decisión?
J.D: De alguna manera, simplemente sucedió. No había un plan de antemano de tocar con tres guitarristas cuando empezamos, pero un día le preguntamos a Tristan si estaba interesado en unírsenos, al otro día lo consulté con la banda, y un mes después éramos un grupo con cinco integrantes y compusimos “Vagevuur”. Tener tres guitarristas amplía las posibilidades, pero también requiere cierta restricción. Tendemos a enfocarnos mucho en las texturas y las capas. Algunos detalles pueden ser difíciles de distinguir, pero son parte integral del sonido y se notaría su falta si no estuvieran.
-También pensaba en la elección del idioma, el contenido de las letras y su rol en la música que hacen, considerando lo emotiva y diversa que es.
J.D.: Pasar del inglés al holandés tampoco fue algo planificado. Al tratar de cantar “Vreugd” tal como era ni bien empezamos, simplemente no funcionaba. Yo tenía un poema escrito en mi teléfono y lo improvisé sobre la canción. Esa es la letra que quedó grabada. No me agradaba la idea de alternar entre el inglés y el holandés, así que decidimos usar solamente el holandés. Escribir en mi propio idioma me resulta incómodo y extraño, y por eso lo prefiero; es una manera más despojada y sincera de expresarme. En cuanto a la temática, no es un álbum feliz. Muchas de las letras reflejan la depresión, el comportamiento obsesivo, cierto destello de sanación. Dado que llevó un tiempo que el disco saliera, las letras representan un compilado de cinco años de porquería para mí, algo sobre lo que puedo reflexionar ahora que estoy en un lugar mucho mejor.
-Están próximos a realizar un concierto gratuito por live stream (sábado 27/03). Pude ver el que grabaron el año pasado (“The Isolation Sessions”) y lo disfruté mucho. ¿Qué podemos esperar del que se viene y cómo los afectó la pandemia como banda?
N: Para ser honestos, el show será muy similar al que viste. Debido a las estrictas leyes que hay en nuestro país en relación con la pandemia, no hemos podido ensayar por un largo tiempo, así que era imposible que pudiéramos incluir material nuevo, aunque hay mucho. Editar un disco en medio de una crisis global tampoco es lo ideal, porque no tuvimos la posibilidad de promocionarlo sobre el escenario, tal como lo hubiésemos querido. Habiendo dicho eso, estamos gratamente sorprendidos por la respuesta que tuvimos hasta el momento, nos hace pensar en cuánto más podríamos haber logrado con la oportunidad de tocar en vivo frecuentemente. Pero no todo es malo; pudimos componer mucho y deseamos componer más y volver al estudio. También hay planes para grabar un EP, algo que nos encantaría poder hacer este año. “Elegieën” tardó cuatro años en salir, y no vamos a volver a pasar por eso, así que esperen más de nuestra música en un futuro cercano.
-¿Hay algo que quisieran decirle a la gente en América Latina y España que todavía no escuchó a la banda?
N: Escuchen el disco: en el peor de los casos habrán desperdiciado algunos minutos de su aislamiento.