The Electric Alley llevan haciendo ruido más de una década en Cádiz con cuatro discos a sus espaldas y bajo esta premisa llegan a Barcelona con entradas agotadas para su única presentación en la céntrica sala del Poblenou. La química entre público y banda encendió nada más pisar las tablas, los cuatro miembros Jaime Moreno en voz y guitarra rítmica, el virtuoso Nado Perfumo, Rafa González Benítez batería y Sergio Reyes bajo y coros. Su impronta es el hard rock de los setenta con energía y pasión: los primeros acordes fueron “Apache” también nombre de su último disco a la fecha, un rock suave que terminó siendo coreada al final. “Hurricane” gana en directo con el rollo country en orden cronológico despuntaron “One Lasting Light” a la espera de más material inédito a futuro, ya que esta placa es del 2022. La gloriosa “Standing” ya puso a bailar en modo retro a sus primeras composiciones dejando que el rock ibérico puede ser de calidad internacional. Los riffs aumentan en intensidad “You Give Me Somethings” los aires a los cuervos negros es innegable si hilamos más fino llegamos a Led Zeppelin otra influencia clara en su sonido. El juego de metáforas sigue “Last Letter” Jaime Moreno irradia simpatía y dirige al personal apoyándose en las cálidas palmas y los coros de los más cercanos al pequeño escenario.
A partir de “Make It Through The Night” todo es camino de rosas los cambios de tonos y la sólida pegada de metrónomo de Rafa en la percusión que perfectamente podría hacer coros, ya que se las canta todas y cada una de las letras en el listado de canciones. Los zeppelianos riffs al estilo Page desfilan por el mástil de Nando y las subidas de tono de Jaime no hacen más que emocionarse, disfrutar y volver a los clásicos de la música. El romanticismo se adueña del ambiente “Thunderbird Or Vulture” poniendo la pausa a tanto jolgorio por el rock duro. Dejando las moñas atrás “Cowboy Song” es su electrizante homenaje a Phil Lynott y sus inmortales Thin Lizzy se permiten cabalgar por la vasta duración de la canción para mostrar las habilidades instrumentales de cada uno de los componentes en sus respectivos puestos concluyendo con una jam grupal.
Las continuas idas al vaso cervecero fueron la tónica de su vocalista para apagar la sed e hidratar las cuerdas vocales para el regalarnos dos joyas más “Celebration” y “Fireworks” cantadas como los dioses del olimpo del hard rock acompañas por las guitarras las icónicas Les Paul y la incombustible Telecaster La retirada de la banda al completo fue breve para atacar los bises amplificados de Los Eléctricos Alley más crudos “Up The Flames” bajo la línea de los australianos AC DC para ser crucificados por el rock and roll de “Get Electrified” sin apagar pelo de actitud y técnica vocal e instrumental. Bajamos al mundo del blues rock “Eagles Fly Solo” y al cerrar los ojos aparecía el fantasma de Chris Robinson encarnado en Jaime, dejando de lado las odiosas comparaciones esta banda si fuera afincada en la tierra de las oportunidades se comerían el mundo como ya son la sensación del genero. Ya es hora de poner punto final a este viaje por el rock con una reliquia del repertorio de los gaditanos “No Control” que puso la velocidad a la fiesta de los amantes de las guitarras
The Electric Alley son el diamante del rock duro que brilla con sonido propio y una calidad fuera de serie que nunca pasa de moda.
The Electric Alley llevan haciendo ruido más de una década en Cádiz con cuatro discos a sus espaldas y bajo esta premisa llegan a Barcelona con entradas agotadas para su única presentación en la céntrica sala del Poblenou. La química entre público y banda encendió nada más pisar las tablas, los cuatro miembros Jaime Moreno en voz y guitarra rítmica, el virtuoso Nado Perfumo, Rafa González Benítez batería y Sergio Reyes bajo y coros. Su impronta es el hard rock de los setenta con energía y pasión: los primeros acordes fueron “Apache” también nombre de su último disco a la fecha, un rock suave que terminó siendo coreada al final. “Hurricane” gana en directo con el rollo country en orden cronológico despuntaron “One Lasting Light” a la espera de más material inédito a futuro, ya que esta placa es del 2022. La gloriosa “Standing” ya puso a bailar en modo retro a sus primeras composiciones dejando que el rock ibérico puede ser de calidad internacional. Los riffs aumentan en intensidad “You Give Me Somethings” los aires a los cuervos negros es innegable si hilamos más fino llegamos a Led Zeppelin otra influencia clara en su sonido. El juego de metáforas sigue “Last Letter” Jaime Moreno irradia simpatía y dirige al personal apoyándose en las cálidas palmas y los coros de los más cercanos al pequeño escenario.
A partir de “Make It Through The Night” todo es camino de rosas los cambios de tonos y la sólida pegada de metrónomo de Rafa en la percusión que perfectamente podría hacer coros, ya que se las canta todas y cada una de las letras en el listado de canciones. Los zeppelianos riffs al estilo Page desfilan por el mástil de Nando y las subidas de tono de Jaime no hacen más que emocionarse, disfrutar y volver a los clásicos de la música. El romanticismo se adueña del ambiente “Thunderbird Or Vulture” poniendo la pausa a tanto jolgorio por el rock duro. Dejando las moñas atrás “Cowboy Song” es su electrizante homenaje a Phil Lynott y sus inmortales Thin Lizzy se permiten cabalgar por la vasta duración de la canción para mostrar las habilidades instrumentales de cada uno de los componentes en sus respectivos puestos concluyendo con una jam grupal.
Las continuas idas al vaso cervecero fueron la tónica de su vocalista para apagar la sed e hidratar las cuerdas vocales para el regalarnos dos joyas más “Celebration” y “Fireworks” cantadas como los dioses del olimpo del hard rock acompañas por las guitarras las icónicas Les Paul y la incombustible Telecaster La retirada de la banda al completo fue breve para atacar los bises amplificados de Los Eléctricos Alley más crudos “Up The Flames” bajo la línea de los australianos AC DC para ser crucificados por el rock and roll de “Get Electrified” sin apagar pelo de actitud y técnica vocal e instrumental. Bajamos al mundo del blues rock “Eagles Fly Solo” y al cerrar los ojos aparecía el fantasma de Chris Robinson encarnado en Jaime, dejando de lado las odiosas comparaciones esta banda si fuera afincada en la tierra de las oportunidades se comerían el mundo como ya son la sensación del genero. Ya es hora de poner punto final a este viaje por el rock con una reliquia del repertorio de los gaditanos “No Control” que puso la velocidad a la fiesta de los amantes de las guitarras
The Electric Alley son el diamante del rock duro que brilla con sonido propio y una calidad fuera de serie que nunca pasa de moda.