


La calurosa tarde murciana del Día de Todos los Santos estaba marcada en rojo en el calendario para los amantes del metal alternativo y progresivo. La cita reunía a los noruegos Leprous, acompañados por la banda de folk metal Gåte y los finlandeses Royal Sorrow, ante un público entusiasta que llenó la sala Mamba! y disfrutó de una velada inolvidable.
Los primeros en salir a escena fueron Royal Sorrow, inmersos en la órbita del metal progresivo y alternativo, con un sonido que combina elementos técnicos, atmósferas cinematográficas, riffs potentes y melodías accesibles. Con un sobresaliente Markus Hentunen a la voz y guitarra, ejerciendo de carismático frontman, el grupo ofreció un directo nítido y poderoso ante una sala prácticamente llena desde los primeros compases. Entre los temas más destacados sonaron “Evergreen”, con sus matices orientales; la contundente “Bloodflower”, que debutaba en directo; y la demoledora “Metrograve”, con la que cerraron su actuación.
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Puntualmente, a las 19:45, los noruegos Gåte tomaron el relevo para desplegar su singular propuesta de fusión entre folk tradicional y rock moderno. Su puesta en escena, oscura y melancólica, transportó al público a un gélido bosque escandinavo gracias a una iluminación tenue y una decoración con ramas de árboles. La magnética voz de Gunnhild Sundli brilló sobre una sólida base rítmica, con Mats Paulsen al bajo y Jon Even a la batería. Iniciaron su viaje sonoro con “Skarvane” y la hipnótica “Svarteboka”, que fueron ganando intensidad a medida que avanzaba el concierto. La conexión con el público se consolidó con la delicada “Førnesbrunen”, protagonizada por un bello piano, y alcanzó su punto álgido con “Ulveham” —la canción con la que representaron a Noruega en Eurovisión 2024— y la festiva “Bannlyst”, que puso el broche final a su actuación.
Finalmente, los cabezas de cartel, Leprous, demostraron por qué son una de las bandas más innovadoras y emocionantes del metal progresivo actual. La gira de presentación de su más reciente trabajo, Melodies of Atonement, exhibe un enfoque más directo y contundente, sin perder la emotividad ni la sofisticación sonora que caracteriza a los noruegos. Bajo un juego de luces azules y rojas, fueron alternando temas nuevos con clásicos que hicieron vibrar al público en una comunión perfecta. Buena parte del mérito recae en su carismático vocalista Einar Solberg, cuya potencia y expresividad vocal distinguen al grupo como uno de los máximos exponentes del metal contemporáneo.
El concierto comenzó con “Silently Walking Alone”, seguida de “Illuminate” y “Out of Here”, pertenecientes a su aclamado Aphelion. Los guitarristas Tor Oddmund y Robin Ognedal demostraron una sincronía impecable, ejecutando cada riff con precisión y energía, e incluso sorprendieron con una espectacular versión de “Take On Me”, el clásico de A-ha.
En la parte central del show destacaron “Alleviate”, la desgarradora “Below” y la poderosa “Like a Sunken Ship”, con un atronador Baard Kolstad a la batería y una audiencia completamente entregada. Para el cierre, Leprous ofrecieron un épico final con el binomio “Atonement” y “The Sky Is Red”, coronando una magnífica tarde de metal progresivo y emoción a flor de piel.



La calurosa tarde murciana del Día de Todos los Santos estaba marcada en rojo en el calendario para los amantes del metal alternativo y progresivo. La cita reunía a los noruegos Leprous, acompañados por la banda de folk metal Gåte y los finlandeses Royal Sorrow, ante un público entusiasta que llenó la sala Mamba! y disfrutó de una velada inolvidable.
Los primeros en salir a escena fueron Royal Sorrow, inmersos en la órbita del metal progresivo y alternativo, con un sonido que combina elementos técnicos, atmósferas cinematográficas, riffs potentes y melodías accesibles. Con un sobresaliente Markus Hentunen a la voz y guitarra, ejerciendo de carismático frontman, el grupo ofreció un directo nítido y poderoso ante una sala prácticamente llena desde los primeros compases. Entre los temas más destacados sonaron “Evergreen”, con sus matices orientales; la contundente “Bloodflower”, que debutaba en directo; y la demoledora “Metrograve”, con la que cerraron su actuación.
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Finalmente, los cabezas de cartel, Leprous, demostraron por qué son una de las bandas más innovadoras y emocionantes del metal progresivo actual. La gira de presentación de su más reciente trabajo, Melodies of Atonement, exhibe un enfoque más directo y contundente, sin perder la emotividad ni la sofisticación sonora que caracteriza a los noruegos. Bajo un juego de luces azules y rojas, fueron alternando temas nuevos con clásicos que hicieron vibrar al público en una comunión perfecta. Buena parte del mérito recae en su carismático vocalista Einar Solberg, cuya potencia y expresividad vocal distinguen al grupo como uno de los máximos exponentes del metal contemporáneo.
El concierto comenzó con “Silently Walking Alone”, seguida de “Illuminate” y “Out of Here”, pertenecientes a su aclamado Aphelion. Los guitarristas Tor Oddmund y Robin Ognedal demostraron una sincronía impecable, ejecutando cada riff con precisión y energía, e incluso sorprendieron con una espectacular versión de “Take On Me”, el clásico de A-ha.
En la parte central del show destacaron “Alleviate”, la desgarradora “Below” y la poderosa “Like a Sunken Ship”, con un atronador Baard Kolstad a la batería y una audiencia completamente entregada. Para el cierre, Leprous ofrecieron un épico final con el binomio “Atonement” y “The Sky Is Red”, coronando una magnífica tarde de metal progresivo y emoción a flor de piel.












