El pasado 29 de septiembre, la Sala Wolf de Barcelona se llenó de energía con el esperado regreso de Massacre, uno de los pilares del rock alternativo argentino. La noche prometía emociones intensas y el público no quedó defraudado, ya que la banda supo desplegar su característico sonido, acompañados de una entrega incondicional de los fanáticos. Pero antes de que la banda principal tomara el escenario, Lucho Al Ataque, liderado por Luciano, ex miembro de Ataque 77, ofreció un set cargado de clásicos que calentó motores.
Con Luciano en la voz y el bajo, Lucho Al Ataque entregó un show nostálgico y lleno de himnos del punk rock argentino. El público cantó al unísono temas icónicos como “Arrancacorazones” y “Western”, pero fue su versión de “No me arrepiento de este amor”, de Gilda, la que provocó el mayor fervor entre los asistentes. El set también incluyó sorpresas como “El Jorobadito” de Los Auténticos Decadentes y “Espejo” de Todos Tus Muertos, demostrando la versatilidad y el respeto de la banda por el legado del rock argentino.
Cuando Massacre finalmente subió al escenario, la Sala Wolf explotó. Con Walas al frente, acompañado por El Tordo, Luciano Bochi, Fico y Charly, la banda desplegó un sonido potente y envolvente que mantuvo al público en vilo. Desde los primeros acordes de “Resurrección” hasta el cierre apoteósico con “Diferentes maneras”, el setlist fue un recorrido por su carrera, incluyendo tanto clásicos como temas más recientes.
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Uno de los momentos más destacados de la noche fue cuando Walas, con su particular estilo y usando su característica máscara en algunas canciones, bromeó antes de tocar “La octava maravilla”, diciendo: “Muchos dicen que Massacre debería estar prohibida, pero por suerte muchos más dicen que Massacre es la octava maravilla”. La sala estalló en aplausos, mientras la banda entregaba una versión explosiva de este hit.
El cierre llegó con los esperados “Papel floreado” y “Violence”, llevando la energía al máximo, con el público entregado y coreando cada palabra. Con una actuación impecable y un setlist cuidadosamente elegido, Massacre dejó claro que, después de tantos años, siguen siendo una banda esencial en el rock alternativo de habla hispana. Una noche inolvidable que reafirmó su estatus como leyendas vivientes del rock argentino.
Etiquetas: barcelona, Chainsaw Entertainment, Lucho al Attaque, Massacre, Sala Wolf, WalasEl pasado 29 de septiembre, la Sala Wolf de Barcelona se llenó de energía con el esperado regreso de Massacre, uno de los pilares del rock alternativo argentino. La noche prometía emociones intensas y el público no quedó defraudado, ya que la banda supo desplegar su característico sonido, acompañados de una entrega incondicional de los fanáticos. Pero antes de que la banda principal tomara el escenario, Lucho Al Ataque, liderado por Luciano, ex miembro de Ataque 77, ofreció un set cargado de clásicos que calentó motores.
Con Luciano en la voz y el bajo, Lucho Al Ataque entregó un show nostálgico y lleno de himnos del punk rock argentino. El público cantó al unísono temas icónicos como “Arrancacorazones” y “Western”, pero fue su versión de “No me arrepiento de este amor”, de Gilda, la que provocó el mayor fervor entre los asistentes. El set también incluyó sorpresas como “El Jorobadito” de Los Auténticos Decadentes y “Espejo” de Todos Tus Muertos, demostrando la versatilidad y el respeto de la banda por el legado del rock argentino.
Cuando Massacre finalmente subió al escenario, la Sala Wolf explotó. Con Walas al frente, acompañado por El Tordo, Luciano Bochi, Fico y Charly, la banda desplegó un sonido potente y envolvente que mantuvo al público en vilo. Desde los primeros acordes de “Resurrección” hasta el cierre apoteósico con “Diferentes maneras”, el setlist fue un recorrido por su carrera, incluyendo tanto clásicos como temas más recientes.
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Uno de los momentos más destacados de la noche fue cuando Walas, con su particular estilo y usando su característica máscara en algunas canciones, bromeó antes de tocar “La octava maravilla”, diciendo: “Muchos dicen que Massacre debería estar prohibida, pero por suerte muchos más dicen que Massacre es la octava maravilla”. La sala estalló en aplausos, mientras la banda entregaba una versión explosiva de este hit.
El cierre llegó con los esperados “Papel floreado” y “Violence”, llevando la energía al máximo, con el público entregado y coreando cada palabra. Con una actuación impecable y un setlist cuidadosamente elegido, Massacre dejó claro que, después de tantos años, siguen siendo una banda esencial en el rock alternativo de habla hispana. Una noche inolvidable que reafirmó su estatus como leyendas vivientes del rock argentino.
Etiquetas: barcelona, Chainsaw Entertainment, Lucho al Attaque, Massacre, Sala Wolf, Walas