Después de cuatro años desde su último full álbum ”Pathetic Divinity”, los franceses Mercyless, atacan con un nuevo trabajo musical: ”The Mother of All Plagues” (2020). En esta ocasión la banda mantiene un line-up experimentado: el español Max Otero (Undead Prophecies), se mantiene como único miembro de la formación original en la guitarra y voz, Laurent Michalak (batería), Gautier Merklen (guitarra) y Yann Tligui en el bajo. El arte de la portada está a cargo del ilustrador y músico mexicano Néstor Ávalos Zarate (Postmortem/Proditor Bicorni), mientras que ”The Mother of All Plagues” salió bajo el sello francés XenoKorp.

La grabación, mezclas y masterización se realizaron en Vamacara Studio, Clisson, Francia. No sobra comentar que detrás de Vamacara Studio se encuentra el músico Frédéric Leclercq (Kreator, Sinsaenum, Loudblast, ex-Dragonforce). Mercyless, en esta ocasión presenta once temas y a pesar del número de canciones, el álbum tiene una duración de 35:09 minutos.

El recorrido inicia con ”Infection”, 1:34 minutos de un relato que parece extraído de una película de terror, ambientada con unos sonidos apocalípticos. Ahora el turno es para ”Rival of the Nazarene”, un tema de gran calidad, que a primera impresión nos recuerda a los holandeses Pestilence, tanto en la música como en la interpretación vocal del señor Max Otero. Guitarras pegajosas con sonidos noventas hacen de este un tema formidable. En el minuto 2:36 encontramos un corto solo de guitarra muy en la línea de las primeras épocas de Mercyless, un tema que sirve para apreciar que la banda continúa en un camino similar a todos sus álbumes anteriores.

”Banished from Heaven” es la pieza que continua, con un inicio más agresivo que el tema anterior. Una canción variada, con cambios de velocidad y solos de guitarra increíbles. Sin caer en la saturación sonora Mercyless sabe cautivar al oyente con un tema de Death metal de gran factura, agradable de escuchar. ”Bring Me His Head”, en este tema su batero Laurent Michalak hace presencia notoria en la canción, con unos tiempos veloces que invitan a mover la cabeza. ”Bring Me His Head” muestra un cuerpo sólido en la estructura de las guitarras que juegan creando melodías agresivas donde se comportan como un verdadero tándem de doce cuerdas, expresando un verdadero sentimiento. El track No. 5 es ”Contagion”, el tema no llega al minuto de duración, es tan son sólo una exhalación sonora de una guitarra distante y moribunda que sirve como pausa a este alud musical que nos propone Mercyless.

Así, arribamos a ”Laqueum Diaboli” (la trampa del diablo), una pieza envolvente donde las guitarras logran cautivar de principio a fin. Sin ser un tema veloz ni agresivo, mantiene un medio tiempo preciso con sus guitarras filosas demostrando poder. El séptimo track del álbum es ”Descending to Conquer”, una pista más agresiva y mordaz. Sin lugar a dudas, una canción con matices especiales en sus melodías, una composición que solo bandas de gran recorrido musical logran crear, y es que Mercyless lleva más de treinta años de trayectoria en la escena metalera mundial.

Seguimos avanzando por la propuesta musical de la banda con el tema ”Inherit the Kingdom of Horus”, Merklen y Otero son insistentes con sus guitarras trabajadas casi de forma perfecta, donde los riffs se apoderan del ancho y largo de la canción. La nitidez de esta producción nos permite captar detalladamente cada una de las osadas propuestas de las cuerdas y Max Otero hace un trabajo vocal sobrecogedor. En este punto nos encontramos con el tema que da título al álbum ”Mother of All Plagues”, aquí su baterista Laurent Michalak lleva el tema a parajes más Thrash/Death, acompañado de unos riffs de guitarra voraces a medio tiempo, la voz de Max Otero nos recuerda al holandés Martin Van Drunen (Asphyx, ex-Pestilence), los solos de guitarra son alternados por Otero y Merklen, quienes nos quitan el aliento con su trabajo de cuerdas, tal vez el tema con mayor riqueza en las guitarras de todo el álbum.

En este recorrido por los temas que conforman el álbum es palpable percibir como el sonido de la banda se acrecienta con cada canción que escuchamos. ”All Souls Are Mine”, es el penúltimo track de ”Mother of All Plagues”, una pieza agresiva de principio a fin, rapidez inclemente en la batería, cortes súbitos, donde el bajo hace presencia con audaces adornos. La primera y segunda guitarra están en constante lucha de ráfagas de creatividad desbordante, ¡esa es la propuesta de Mercyless en esta canción!.

El tema elegido para finalizar el álbum es ”Litany of Supplication”, Max Otero propone una voz más gutural, más sucia; los instrumentos entran en una atmósfera espesa de la que jamás logran salir. El bajo realiza un trabajo sobrio pero efectivo a la hora de dar densidad al tema.

Once canciones ejecutadas de manera profesional, un trabajo donde los ya míticos Mercyless dejan claro que están aquí, no como una banda con sonido Old School, sino para ofrecer sonidos actuales y frescos.