Redes Sociales:

Redes Sociales:

NOTICIAS / AGENDA / CRONICAS / ENTREVISTAS / RESEÑAS / ESPECIALES / CONTACTO
Green Lung en Barcelona: “Una auténtica misa pagana”

Green Lung en Barcelona: “Una auténtica misa pagana”

El pasado 2 de marzo, la sala Razzmatazz 2 se transformó en un auténtico templo del rock y el metal con la llegada del Heathen Neverland Tour 2025. En una […]

Bullet For My Valentine + Trivium en Madrid: “El Reencuentro Metalero de una Generación”

Bullet For My Valentine + Trivium en Madrid: “El Reencuentro Metalero de una Generación”

Veinte años, una eternidad en el reloj del rock, habían transcurrido desde que “Tears Don’t Fall” y “Dying In Your Arms” se alzaron como himnos generacionales, ecos de una juventud […]

Onza en Madrid: “Jugando en Primera”

Onza en Madrid: “Jugando en Primera”

El pasado sábado 28 de febrero, The Bassement Club de Madrid se convirtió en el epicentro de una noche cargada de intensidad y energía con el esperado concierto de Onza. […]

Titans of Metal Fest: “Triunfa en su primera edición en CDMX”

Titans of Metal Fest: “Triunfa en su primera edición en CDMX”

El pasado 1 de marzo se celebró la primera edición del Titans of Metal Fest a cargo de Medusa Entertainment, los organizadores del Life After Death, el evento fue algo […]

Napalm Death en Barcelona: “Un asalto sonoro”

Napalm Death en Barcelona: “Un asalto sonoro”

Napalm Death sigue siendo un referente del grindcore y una banda infaltable en los escenarios europeos. En su gira “Campaign For Musical Destruction Tour 2025”, hicieron una parada en la […]

Baroness en Buenos Aires: “Recorriendo el universo de colores y distorsión”

Baroness en Buenos Aires: “Recorriendo el universo de colores y distorsión”

En una jornada de excesiva humedad en la ciudad de Buenos Aires, un nuevo show estaba a punto de desarrollarse en Uniclub, y Track To Hell diría presente una vez […]

Paleface Swiss en Glasgow: “Nadie escapa la horca”

Paleface Swiss en Glasgow: “Nadie escapa la horca”

Jueves 27 de febrero, 18:30. La expectativa se siente en el aire mientras la fila para entrar al SWG3 en Glasgow se extiende, repleta de fanáticos ansiosos por vivir una […]

Pain en Madrid: “La Pasión Supera a los Desajustes”

Pain en Madrid: “La Pasión Supera a los Desajustes”

Peter Tägtgren se ha convertido, con el paso de los años, en una de las figuras más icónicas del metal. Su influencia ha trascendido el ámbito estrictamente musical, consolidándose como […]

JAF y Vitico en Buenos Aires: “Mucho por hacer”

JAF y Vitico en Buenos Aires: “Mucho por hacer”

En una calurosa noche de Buenos Aires en el barrio porteño de Flores, primero JAF y luego Vitico y Los Leones se encargaron de elevar aún más la temperatura con […]

Cryptopsy + Atheist en Buenos Aires: “Destrozando cráneos alrededor del mundo”

Cryptopsy + Atheist en Buenos Aires: “Destrozando cráneos alrededor del mundo”

La gira Burnt into Pieces, que juntó a Cryptopsy y Atheist, se detuvo en Buenos Aires, Argentina, el pasado 20 de febrero de este 2025, y los fans del death […]


Judas Priest en Buenos Aires: “La divinidad del heavy metal”
thumb image

Judas Priest, los Dioses del Metal, volvieron a desplegar sus poderes en Buenos Aires el pasado martes 13 de diciembre en el imponente y lujoso Movistar Arena, sin dudas, uno de los lugares más confortables para ver shows en la ciudad capital. Brindaron una demostración cabal de la esencia más pura de la música pesada como parte del Knotfest Roadshow, que también trajo a Slipknot –creadores del evento- y Trivium, cada banda en distintas fechas.

Un sold out rotundo y el triunfo inmediatamente anterior en semifinales de la Selección Argentina de Fútbol en la Copa Mundial de la FIFA daban el marco para una verdadera fiesta. Gran parte del público llevaba la camiseta albiceleste, más allá de quienes vestían los típicos atuendos de cuero negro, jeans y tachas. Como si fuera poco, el evento fue anunciado como una celebración de los 50 años del heavy metal. Estaban dadas todas las condiciones para una noche inolvidable.

Helmet en Buenos Aires: “Una espera de tres décadas”

Los encargados de dar comienzo a la velada fueron los locales Horcas, una banda que ya tiene 34 años de historia en la escena nacional. Sonaron muy bien, haciendo un repaso de toda su trayectoria y terminando con un cover de “Destrucción” de V8. Su líder, Walter Meza, hizo referencias a la alegría que sentía por el contexto deportivo y por el hecho de estar parado sobre el mismo escenario que luego pisaría el mismísimo Rob Halford, alguien que, según sus propias palabras, fue una enorme influencia en su desarrollo como músico. Tal es así que se arrodilló y besó las tablas. Creo que nadie pensó que ese pudiera ser un gesto exagerado. ¿Quién podría cuestionar la cantidad infinita de cosas que representa el cantante inglés para la cultura que fue gestándose a lo largo de décadas en torno a la música más potente entre todos los géneros?

Empezó a sonar “War Pigs” de Black Sabbath y la idea de estar allí para honrar la magia del más visceral de los estilos musicales se instaló con fuerza en cada corazón. Entonces apareció Judas Priest tocando “The Hellion/Electric Eye”. La banda brinda un espectáculo en el sentido más amplio y profundo de la palabra. La puesta en escena, remitiendo al pasado industrial de Birmingham, el enorme logo móvil de la banda colgando desde el techo, repleto de luces que se proyectaban hacia todos lados, la pantalla de fondo con videos que iban cambiando según la canción, el vestuario clásico del metalhead que el mismo grupo se encargó de crear hacia fines de los setentas y que Halford va cambiando en varias oportunidades, el tradicional ingreso del cantante en motocicleta para cantar “Hell Bent for Leather”: son todos detalles que suman.

Prong en Buenos Aires: “Una alegría desbordante”

La ejecución instrumental de Scott Travis, Ian Hill, Andy Sneap y Richie Faulkner fue impecable. Mientras los pilares de la base rítmica mantienen un perfil bajo, los guitarristas son totalmente histriónicos y se muestran inmersos en su función de encarnar el espíritu más pasional del heavy metal. No obstante, en una parte, el baterista habló con la gente para hacer una referencia al desempeño de Argentina en el partido contra Croacia. Es que, claro, es sabido que a los ingleses también les encanta el fútbol, algo que terminó de confirmarse cuando, hacia el final de “Turbo Lover”, apareció en la pantalla gigante una fotografía de Lionel Messi, lo que supuso un gesto de cálido acercamiento con la congregación de almas emocionadas que colmaba el lugar. Los cantos vinculados al fútbol se reiteraron a lo largo de todo el show, al igual que el idiosincrático “olé, olé”, que en algunas ocasiones se completaba con “Judas” y en otras con “Halford”. También se pudo escuchar el “¡cada día te quiero más… Judas/Halford… es un sentimiento, no puedo parar!”

La performance vocal del enérgico ícono de 71 años sigue siendo excepcional y no se debilitó a lo largo de todo el concierto. Es posible que en algunas ocasiones hayan ocurrido ciertas oscilaciones en el funcionamiento del micrófono, pero darles demasiada importancia sería como tapar el sol con un dedo. Más allá de su canto, es un frontman inigualable. Hablaba en algunos tramos, pero expresaba su agradecimiento de manera constante mediante gestos que lo hacían lucir realmente conmovido. Como nota de color, tuvo su momento “a la Freddie Mercury en Live Aid” vocalizando y haciendo que el coro de miles de personas repitiera lo que él hacía. Esto se extendió por varios minutos y todo el mundo lo disfrutó mucho. Es probable que la tendencia natural del público argentino a expresarse mediante el canto contribuyera con la decisión del músico de dedicarle un buen rato a este ida y vuelta que se sintió singularmente íntimo.

Behemoth y Arch Enemy en Buenos Aires: “Un ritual de música rebelde al extremo”

Además de las canciones ya mencionadas, sonaron “Riding on the Wind”, “You’ve Got Another Thing Comin” (que hizo explotar el ánimo festivo), “Jawbreaker”, “Firepower”, “Devil’s Child”, “Steeler”, “Between the Hammer and the Anvil”, “Metal Gods” (sentida como un himno), “The Green Manalishi”, “Screaming for Vengeance”, “Painkiller” (motivó gritos exaltados ni bien sonó la batería), “Breaking the Law” (cantada a más no poder por cada persona presente) y “Living After Midnight” (para terminar bien arriba).  

El mosh fue constante, intenso y masivo. A su vez, hubo mucho crowd surfing que mantuvo ocupado al personal de prevención detrás de las vallas frente al escenario. Flameaban las banderas argentinas y de otros países sudamericanos. 

También la bandera del orgullo LGBTQ, y he aquí un aspecto muy interesante. Rob Halford representa eso, entre tantas otras cosas: la disidencia sexual en los orígenes mismos de la cultura metalera. Es factible que esto se asocie con una observación particular: Judas Priest debe ser, entre las bandas clásicas, una de las que tiene mayor recambio generacional. Lejos de haber solamente personas de mediana edad en el recinto, había una cantidad significativa de adolescentes y jóvenes con remeras de la banda y sus cabellos teñidos de colores, además de familias con niñas y niños rebosantes de felicidad. Así es que los ingleses brindaron un show impresionante, en el que confluyeron diversos motivos para la esperanza: la gente puede unirse, las mentalidades pueden cambiar y la buena música perdura, justamente, porque lo clásico es aquello que resiste el paso del tiempo sin perder sus virtudes.

Fotografías por Fernando Serani, gentileza: Metaleyewitness.com

 

 

 

Etiquetas: , , , ,

Judas Priest en Buenos Aires: “La divinidad del heavy metal”
thumb image

Judas Priest, los Dioses del Metal, volvieron a desplegar sus poderes en Buenos Aires el pasado martes 13 de diciembre en el imponente y lujoso Movistar Arena, sin dudas, uno de los lugares más confortables para ver shows en la ciudad capital. Brindaron una demostración cabal de la esencia más pura de la música pesada como parte del Knotfest Roadshow, que también trajo a Slipknot –creadores del evento- y Trivium, cada banda en distintas fechas.

Un sold out rotundo y el triunfo inmediatamente anterior en semifinales de la Selección Argentina de Fútbol en la Copa Mundial de la FIFA daban el marco para una verdadera fiesta. Gran parte del público llevaba la camiseta albiceleste, más allá de quienes vestían los típicos atuendos de cuero negro, jeans y tachas. Como si fuera poco, el evento fue anunciado como una celebración de los 50 años del heavy metal. Estaban dadas todas las condiciones para una noche inolvidable.

Helmet en Buenos Aires: “Una espera de tres décadas”

Los encargados de dar comienzo a la velada fueron los locales Horcas, una banda que ya tiene 34 años de historia en la escena nacional. Sonaron muy bien, haciendo un repaso de toda su trayectoria y terminando con un cover de “Destrucción” de V8. Su líder, Walter Meza, hizo referencias a la alegría que sentía por el contexto deportivo y por el hecho de estar parado sobre el mismo escenario que luego pisaría el mismísimo Rob Halford, alguien que, según sus propias palabras, fue una enorme influencia en su desarrollo como músico. Tal es así que se arrodilló y besó las tablas. Creo que nadie pensó que ese pudiera ser un gesto exagerado. ¿Quién podría cuestionar la cantidad infinita de cosas que representa el cantante inglés para la cultura que fue gestándose a lo largo de décadas en torno a la música más potente entre todos los géneros?

Empezó a sonar “War Pigs” de Black Sabbath y la idea de estar allí para honrar la magia del más visceral de los estilos musicales se instaló con fuerza en cada corazón. Entonces apareció Judas Priest tocando “The Hellion/Electric Eye”. La banda brinda un espectáculo en el sentido más amplio y profundo de la palabra. La puesta en escena, remitiendo al pasado industrial de Birmingham, el enorme logo móvil de la banda colgando desde el techo, repleto de luces que se proyectaban hacia todos lados, la pantalla de fondo con videos que iban cambiando según la canción, el vestuario clásico del metalhead que el mismo grupo se encargó de crear hacia fines de los setentas y que Halford va cambiando en varias oportunidades, el tradicional ingreso del cantante en motocicleta para cantar “Hell Bent for Leather”: son todos detalles que suman.

Prong en Buenos Aires: “Una alegría desbordante”

La ejecución instrumental de Scott Travis, Ian Hill, Andy Sneap y Richie Faulkner fue impecable. Mientras los pilares de la base rítmica mantienen un perfil bajo, los guitarristas son totalmente histriónicos y se muestran inmersos en su función de encarnar el espíritu más pasional del heavy metal. No obstante, en una parte, el baterista habló con la gente para hacer una referencia al desempeño de Argentina en el partido contra Croacia. Es que, claro, es sabido que a los ingleses también les encanta el fútbol, algo que terminó de confirmarse cuando, hacia el final de “Turbo Lover”, apareció en la pantalla gigante una fotografía de Lionel Messi, lo que supuso un gesto de cálido acercamiento con la congregación de almas emocionadas que colmaba el lugar. Los cantos vinculados al fútbol se reiteraron a lo largo de todo el show, al igual que el idiosincrático “olé, olé”, que en algunas ocasiones se completaba con “Judas” y en otras con “Halford”. También se pudo escuchar el “¡cada día te quiero más… Judas/Halford… es un sentimiento, no puedo parar!”

La performance vocal del enérgico ícono de 71 años sigue siendo excepcional y no se debilitó a lo largo de todo el concierto. Es posible que en algunas ocasiones hayan ocurrido ciertas oscilaciones en el funcionamiento del micrófono, pero darles demasiada importancia sería como tapar el sol con un dedo. Más allá de su canto, es un frontman inigualable. Hablaba en algunos tramos, pero expresaba su agradecimiento de manera constante mediante gestos que lo hacían lucir realmente conmovido. Como nota de color, tuvo su momento “a la Freddie Mercury en Live Aid” vocalizando y haciendo que el coro de miles de personas repitiera lo que él hacía. Esto se extendió por varios minutos y todo el mundo lo disfrutó mucho. Es probable que la tendencia natural del público argentino a expresarse mediante el canto contribuyera con la decisión del músico de dedicarle un buen rato a este ida y vuelta que se sintió singularmente íntimo.

Behemoth y Arch Enemy en Buenos Aires: “Un ritual de música rebelde al extremo”

Además de las canciones ya mencionadas, sonaron “Riding on the Wind”, “You’ve Got Another Thing Comin” (que hizo explotar el ánimo festivo), “Jawbreaker”, “Firepower”, “Devil’s Child”, “Steeler”, “Between the Hammer and the Anvil”, “Metal Gods” (sentida como un himno), “The Green Manalishi”, “Screaming for Vengeance”, “Painkiller” (motivó gritos exaltados ni bien sonó la batería), “Breaking the Law” (cantada a más no poder por cada persona presente) y “Living After Midnight” (para terminar bien arriba).  

El mosh fue constante, intenso y masivo. A su vez, hubo mucho crowd surfing que mantuvo ocupado al personal de prevención detrás de las vallas frente al escenario. Flameaban las banderas argentinas y de otros países sudamericanos. 

También la bandera del orgullo LGBTQ, y he aquí un aspecto muy interesante. Rob Halford representa eso, entre tantas otras cosas: la disidencia sexual en los orígenes mismos de la cultura metalera. Es factible que esto se asocie con una observación particular: Judas Priest debe ser, entre las bandas clásicas, una de las que tiene mayor recambio generacional. Lejos de haber solamente personas de mediana edad en el recinto, había una cantidad significativa de adolescentes y jóvenes con remeras de la banda y sus cabellos teñidos de colores, además de familias con niñas y niños rebosantes de felicidad. Así es que los ingleses brindaron un show impresionante, en el que confluyeron diversos motivos para la esperanza: la gente puede unirse, las mentalidades pueden cambiar y la buena música perdura, justamente, porque lo clásico es aquello que resiste el paso del tiempo sin perder sus virtudes.

Fotografías por Fernando Serani, gentileza: Metaleyewitness.com

 

 

 

Etiquetas: , , , ,

thumb image
Hirax
Faster Than Death (2025)
thumb image
Bleeding Through
Nine (2025)
thumb image
The 7th Guild
Triumviro (2025)
thumb image
Dynazty
Game Of Faces (2025)

 



thumb image
Hirax
Faster Than Death (2025)
thumb image
Bleeding Through
Nine (2025)
thumb image
The 7th Guild
Triumviro (2025)
thumb image
Dynazty
Game Of Faces (2025)