Midas es una banda estadounidense de Detroit que alude a un metal clásico sólido, su carta de presentación en algunas redes sociales.

La canción inicial “Slaves to the Night” nos presenta sonidos comunes con rock melódico, con guitarras de sonidos gemelos medianamente intensas, al igual que la parte vocal que va al ritmo de la canción con un coro con remates de batería bastante pegajosos, solos de guitarra y partes que dan una sensación a sonidos comunes ya existentes en bandas clásicas.

El ambiente y los sonidos que prevalecen en el disco son como tener un vistazo en fragmentos del pasado, hasta en la forma en la que se encuentran estructurados los sonidos presentados en las distintas canciones, no solo en forma si no también en fondo. La ecualización remite directamente a una forma de grabación análoga, sin tanto maquillaje ni tomas incontables para resultados cercanos a la perfección.

Es hasta que pasamos la segunda mitad del disco, en “Running Scared”, en donde el ritmo se vuelve frenético. La velocidad se transforma en un ritmo que va escalando hasta que nos encontramos frente a un solo de guitarra y un espacio donde la batería y las guitarras van marcando el frenesí de la canción.

“Golden Chariots” es la canción rítmica con la que termina el disco, y que nos deja en claro que es una buena carta de presentación en donde de forma premeditada se busca imitar sonidos y fragmentos asociados a una época referencial para el género, en el que no había tanta tecnología al servicio de la producción. Es un buen disco debut, sólo el tiempo nos dirá cual será la continuación de esta banda que alude a sonidos del pasado en pleno 2022.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: Cobra Spell – Anthems of the Night EP (2022)