Nos encontramos ante el cuarto full-length de Implore, esta banda alemana de grindcore/blackened death metal/crust integrada por el argentino Gabriel Dubko (voz y teclados), Eduardo Petro (guitarras), Carol Lieb (bajo y coros) y Markus Matzinger (batería). El lanzamiento está a cargo del sello Church Road Records. El arte de tapa fue realizado por otro argentino: el magnífico Santiago Caruso, famoso por sus ilustraciones de la obra de Lovecraft. Las letras en inglés exploran diversas temáticas ligadas a las miserias humanas. Algunos grupos que me vienen a la mente para comparar la música de Implore son Nails, The Drip, Theories, Hexis y All Pigs Must Die, entre otros.

Fieles a su estilo, todos los tracks son relativamente breves. “Prior Void” es un comienzo brutal. La banda ya nos presenta la interacción entre la voz principal y su trasfondo gutural, y los riffs contundentes montados sobre una base rítmica extremadamente cambiante. “The Burden of Existence” arranca con un machaque aplastante, que pronto da paso a un frenesí catártico bastante ganchero, para terminar con un breakdown que parece un derrumbe en repetición. El canto cavernoso adquiere un protagonismo esporádico. Luego “Archetype” recupera velocidad con una cadencia que remite al viejo death metal sueco y suma el detalle de algunos armónicos de púa. Las reminiscencias escandinavas se acentúan en “Masochistic Tendencies” aunque atravesadas por una composición de actitud post-hardcore, algo que es reiterado y puede recordar a Converge. La parte en la que el bajo suena altivo y la guitarra queda acoplando es un gran acierto.

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“Accept the Loss” baja el tempo pero no la intensidad y tiene un riff principal despiadado. El canto de Dubko es siempre rabioso. “Sun Deprived” acelera la debacle violentamente. Hay que admitir que Implore sabe combinar agresividad y groove con una rapidez intimidante. La ejecución de la batería es de una solidez temeraria y por supuesto incluye momentos D-beat. A toda la diversidad de riffs desplegada hasta el momento, “Failure Through Self Preservation” le agrega algunos que recuerdan al thrash metal, así como cortes particularmente interesantes, que vuelven a ser un recurso en “Ultimate Freedom”, track que incluye un solo de guitarra disruptivo. “Love Will Gradually Perish” es la canción que se destaca en el álbum, por ser la más extensa, melódica y oscura de todas. Incorpora teclados, punteos de guitarra aislados y constituye lo más alto creativamente. “The Sense of Endings” apuesta otra vez a la crueldad en múltiples manifestaciones sonoras para darle al disco un cierre sin piedad.