Noche de puro groove y sonido moderno fue la que tuvimos el 16 de noviembre en el Wolf de Barcelona, con una fiesta comandada por los estadounidenses Stray From The Path y con un rejunte de invitados de lujo venidos desde algunos de los lugares más remotos del mundo, marcando que el sonido pesado se siente en cualquier rincón del planeta.
La noche comenzó a pisar fuerte con la presentación de Knosis, grupo oriundo de Japón con poca historia propia pero con integrantes de gran experiencia en la escena del rock nipón, teniendo al ex Crystal Lake Ryo Kinoshita en voces. Presentando su EP The Shattering, el trío mecha sus canciones propias como “Sei-sai” y “Yakusai” con un cover de “March of the Pigs” de NIN, dando lugar a una actuación redonda mientras el local se iba llenando con el público y el ambiente se calentaba.
Siguientes en la lista estaban los australianos Void of Vision, cuarteto de estética dark y música acorde, mezclando elementos de metalcore, nu metal y sonidos industriales. Títulos como “Dominatrix”, “Vampyr” y “Hell Hell Hell” son muestra suficiente de lo que esperarse en un recital de estos oriundos de Melbourne, pero por sí solos no logran expresar el talento extremo de estos músicos, sobre todo de su cantante Jack Bergin.
Más tarde aparecieron otros australianos, en este caso Make Them Suffer de Perth, en la costa oeste del país. Ya para este punto el público no sólo era más numeroso sino también más animado, marcando las primeras instancias de verdadero pogo entre la gente, algo que se entiende perfectamente considerando el sonido poderoso del quinteto y el sonido impecable que les tocaría. Enfocados en su último trabajo How to Survive a Funeral (2020), el grupo liderado por el cantante Sean Harmanis y el guitarrista Nick McLernon demostró toda su fuerza arriba del escenario de Wolf.
Ya para el final era momento del plato fuerte de la noche, que vino obviamente de la noche de Stray From The Path. Con más de veinte años como banda, el cuarteto neoyorquino viene llenando ese espacio de rap metal ultra politizado que tanto hace falta, y la gente recibe con un pogo masivo esas diatribas contra el sistema con títulos como “Goodnight Alt-Right”, “Neighbourhood Watch” y “Law Abiding Citizen”, acompañadas por las rimas de Drew York, los riffs de Thomas Williams y la base poderosa del bajista Anthony “Dragon Neck” Altamura y el baterista Craig “Cowboy Crag” Reynolds. Tras “May You Live Forever” y “Ladder Work”, el grupo de NYC se retiró, obviamente para luego volver con un bis, en este caso “First World Problem Child”, ya así marcando el cierre de su presentación con otra diatriba en contra de la miopía típica de las poblaciones privilegiadas.
¿Puede ser un tanto cansador? Obviamente, pero también es necesario que alguien lo diga, y el mensaje de SFTP es valioso en estos días, como pudimos ver en el Wolf de Barcelona. Esperemos que vuelvan pronto, manteniendo la misma energía de siempre.
Noche de puro groove y sonido moderno fue la que tuvimos el 16 de noviembre en el Wolf de Barcelona, con una fiesta comandada por los estadounidenses Stray From The Path y con un rejunte de invitados de lujo venidos desde algunos de los lugares más remotos del mundo, marcando que el sonido pesado se siente en cualquier rincón del planeta.
La noche comenzó a pisar fuerte con la presentación de Knosis, grupo oriundo de Japón con poca historia propia pero con integrantes de gran experiencia en la escena del rock nipón, teniendo al ex Crystal Lake Ryo Kinoshita en voces. Presentando su EP The Shattering, el trío mecha sus canciones propias como “Sei-sai” y “Yakusai” con un cover de “March of the Pigs” de NIN, dando lugar a una actuación redonda mientras el local se iba llenando con el público y el ambiente se calentaba.
Siguientes en la lista estaban los australianos Void of Vision, cuarteto de estética dark y música acorde, mezclando elementos de metalcore, nu metal y sonidos industriales. Títulos como “Dominatrix”, “Vampyr” y “Hell Hell Hell” son muestra suficiente de lo que esperarse en un recital de estos oriundos de Melbourne, pero por sí solos no logran expresar el talento extremo de estos músicos, sobre todo de su cantante Jack Bergin.
Más tarde aparecieron otros australianos, en este caso Make Them Suffer de Perth, en la costa oeste del país. Ya para este punto el público no sólo era más numeroso sino también más animado, marcando las primeras instancias de verdadero pogo entre la gente, algo que se entiende perfectamente considerando el sonido poderoso del quinteto y el sonido impecable que les tocaría. Enfocados en su último trabajo How to Survive a Funeral (2020), el grupo liderado por el cantante Sean Harmanis y el guitarrista Nick McLernon demostró toda su fuerza arriba del escenario de Wolf.
Ya para el final era momento del plato fuerte de la noche, que vino obviamente de la noche de Stray From The Path. Con más de veinte años como banda, el cuarteto neoyorquino viene llenando ese espacio de rap metal ultra politizado que tanto hace falta, y la gente recibe con un pogo masivo esas diatribas contra el sistema con títulos como “Goodnight Alt-Right”, “Neighbourhood Watch” y “Law Abiding Citizen”, acompañadas por las rimas de Drew York, los riffs de Thomas Williams y la base poderosa del bajista Anthony “Dragon Neck” Altamura y el baterista Craig “Cowboy Crag” Reynolds. Tras “May You Live Forever” y “Ladder Work”, el grupo de NYC se retiró, obviamente para luego volver con un bis, en este caso “First World Problem Child”, ya así marcando el cierre de su presentación con otra diatriba en contra de la miopía típica de las poblaciones privilegiadas.
¿Puede ser un tanto cansador? Obviamente, pero también es necesario que alguien lo diga, y el mensaje de SFTP es valioso en estos días, como pudimos ver en el Wolf de Barcelona. Esperemos que vuelvan pronto, manteniendo la misma energía de siempre.