Entrevistamos a Andy Matthews, guitarrista de la banda de Death Doom Metal inglesa Consecration, que ya tiene una trayectoria de una década. Hablamos sobre el grupo y la música en situación pandémica.
– Te agradezco mucho esta entrevista. Su música me parece muy interesante y sería bueno que se difundiera en América Latina y España. Comentanos acerca de los orígenes de Consecration como banda, su discografía y su actualidad.
AM: Consecration se formó hace diez años, allá por mayo de 2010. Editamos los EPs “Gut the Priest” (2010), “Unhallowed” (2011), “Echoes of the Dead” (2013), todos de manera independiente, seguidos del álbum “Ephemerality” (2014) lanzado por UKEM Records. Luego salió la antología “Remembrance” en 2018, que fue el puente para llegar a nuestro disco del año pasado, “Fragilium”, editado por Solitude Productions.
La formación actual de la banda es Daniel Bollans (voz), Shane Amies (bajo), Liam Houseago (guitarra), y Jorge Figueredo (batería), aparte de mí. He estado en la banda por casi dos años.
– “Fragilium”, su segundo disco, es excelente. Me interesaría saber acerca del proceso creativo y el desarrollo de su sonido a lo largo del tiempo.
AM: El sonido fue cambiando. Creo que en el EP “Gut the Priest” se evidencian las estructuras básicas que denotan la intención que posteriormente se llegaría a concretar en un larga duración. Considero que en “Ephemerality”, el grupo pudo generar su propio sonido, con aportes de las influencias de cada integrante.
El proceso creativo siempre ha sido similar. Los guitarristas traen ideas para riffs o algunas secciones y toda la banda contribuye en la sala de ensayo. No hay una fórmula que sigamos, todo se basa en lo que se siente bien para nosotros. Liam escribió la mayor parte de la música en “Fragilium”, y la desolación que inspira el álbum, de algún modo, refleja una etapa emocionalmente dura para el grupo, por varias razones. Es esperable que haya una mayor evolución para el próximo disco.
– Hablemos acerca de las letras. ¿Qué temáticas abordan y por qué?
AM: Dan, nuestro vocalista, las escribe todas, y son muy personales. Suelen lidiar con la pérdida, el abandono, la angustia. Hay algunas referencias a lo sobrenatural y el horror, por ejemplo, “The Visitant” se vincula al fenómeno Poltergeist. No me parece que abarquen más allá, se trata de que encajen con la música. Dan también hace el arte visual, que hace poco fue reconocido al incorporarse a todo un libro, así que aporta al grupo mucho más que voces guturales.
– Ustedes dicen tocar Death Doom Metal, una categoría que encuentro apropiada. Los ritmos y riffs suenan a puro Doom, mientras la voz remite al Death. Me preguntaba por sus influencias y la música que escuchan hoy en día.
AM: Estamos influenciados por muchas bandas de Doom viejas, tales como My Dying Bride, Paradise Lost y Anathema. No obstante, el Death también es importante, y de hecho es mi principal influencia. Hablo de grupos como Autopsy, Morbid Angel, Death, Pestilence, etc. Consecration me hizo adentrarme mucho más en el Doom y disfruto de algunas bandas contemporáneas, tales como Daylight Dies, Evoken, Red Moon Architect, solo por nombrar algunas.
– ¿Qué podés contarnos acerca de la escena underground en Inglaterra? Por supuesto, hago esta pregunta con un foco en el estilo que ustedes tocan, pensando en la audiencia, otras bandas, lugares para tocar, sellos discográficos, etc.
AM: La audiencia no es muy grande para el estilo, pero existe. Hemos tocado por todo el país y siempre fuimos bien recibidos. Tocamos como teloneros de bandas importantes como Vallenfyre, Godthrymm y Esoteric, por ejemplo. Tengo la impresión de que se estaba generando algo interesante, hasta que la pandemia de Covid-19 detuvo todo. Hay muy buenos locales para tocar, pero nos preocupa que muchos de los más pequeños no logren sobrevivir financieramente tras este período de clausura y restricciones.
– ¿Cómo les está afectando la pandemia como banda y a nivel personal? ¿Qué planes tiene Consecration y hasta qué punto dependen de la evolución epidemiológica?
AM: La pandemia detuvo por completo la actividad de la banda. Teníamos un gran concierto programado con Creeping Flesh de Suecia y hubo que cancelarlo. Todos los shows están siendo suspendidos. Por suerte, hemos estado escribiendo el nuevo álbum y pudimos concentrarnos en que sea lo mejor que pueda ser. De hecho, estamos listos para ir al estudio próximamente. Tratamos de mantenernos productivos y creando contenido para las redes sociales. Personalmente, es un año muy raro para mí, pero para algunos viene siendo catastrófico. No creo que el año próximo mágicamente sea mucho mejor, solo podemos tener la esperanza.
– ¿Qué opinás sobre el live streaming? ¿Creés que es algo que en el futuro coexistirá con los shows presenciales?
AM: Posiblemente sigan, en especial, si tenemos en cuenta que muchas restricciones a los conciertos en vivo van a mantenerse, y hacer y ver cosas a distancia será más fácil. Creo que es algo bueno que demuestra el esfuerzo de las bandas para sobrevivir y hacer lo mejor posible en esta situación.
– ¿Y qué pensás sobre los protocolos que algunos grandes festivales ya están publicando, que incluyen el uso de máscaras y el distanciamiento social? ¿Qué hay de los shows en lugares pequeños? ¿Hay protocolos posibles, más aún, si tenemos en cuenta las características del público que escucha Metal?
AM: Está claro por qué son necesarios. El distanciamiento social va a ser muy difícil de imponer, particularmente cuando se trata de música muy pesada, a la que la gente responde físicamente. Los lugares más chicos son los que más van a sufrir, porque van a tener que ver cómo afrontar los gastos que hacen que un show sea viable. Habrá que seguir adelante y ver qué sucede.
– ¿Hay algo que te gustaría decirle a la gente en América Latina y España que todavía no escuchó Consecration?
AM: Si disfrutan del Death o Doom Metal de la vieja escuela, desolador, denle una escuchada a nuestro último disco y estén atentos al que viene: vamos a desplegar un mayor espectro de grises. El año pasado tocamos en Portugal como banda soporte de Alcest, así que sería grandioso poder tocar en España y Latinoamérica en un futuro próximo.
Entrevistamos a Andy Matthews, guitarrista de la banda de Death Doom Metal inglesa Consecration, que ya tiene una trayectoria de una década. Hablamos sobre el grupo y la música en situación pandémica.
– Te agradezco mucho esta entrevista. Su música me parece muy interesante y sería bueno que se difundiera en América Latina y España. Comentanos acerca de los orígenes de Consecration como banda, su discografía y su actualidad.
AM: Consecration se formó hace diez años, allá por mayo de 2010. Editamos los EPs “Gut the Priest” (2010), “Unhallowed” (2011), “Echoes of the Dead” (2013), todos de manera independiente, seguidos del álbum “Ephemerality” (2014) lanzado por UKEM Records. Luego salió la antología “Remembrance” en 2018, que fue el puente para llegar a nuestro disco del año pasado, “Fragilium”, editado por Solitude Productions.
La formación actual de la banda es Daniel Bollans (voz), Shane Amies (bajo), Liam Houseago (guitarra), y Jorge Figueredo (batería), aparte de mí. He estado en la banda por casi dos años.
– “Fragilium”, su segundo disco, es excelente. Me interesaría saber acerca del proceso creativo y el desarrollo de su sonido a lo largo del tiempo.
AM: El sonido fue cambiando. Creo que en el EP “Gut the Priest” se evidencian las estructuras básicas que denotan la intención que posteriormente se llegaría a concretar en un larga duración. Considero que en “Ephemerality”, el grupo pudo generar su propio sonido, con aportes de las influencias de cada integrante.
El proceso creativo siempre ha sido similar. Los guitarristas traen ideas para riffs o algunas secciones y toda la banda contribuye en la sala de ensayo. No hay una fórmula que sigamos, todo se basa en lo que se siente bien para nosotros. Liam escribió la mayor parte de la música en “Fragilium”, y la desolación que inspira el álbum, de algún modo, refleja una etapa emocionalmente dura para el grupo, por varias razones. Es esperable que haya una mayor evolución para el próximo disco.
– Hablemos acerca de las letras. ¿Qué temáticas abordan y por qué?
AM: Dan, nuestro vocalista, las escribe todas, y son muy personales. Suelen lidiar con la pérdida, el abandono, la angustia. Hay algunas referencias a lo sobrenatural y el horror, por ejemplo, “The Visitant” se vincula al fenómeno Poltergeist. No me parece que abarquen más allá, se trata de que encajen con la música. Dan también hace el arte visual, que hace poco fue reconocido al incorporarse a todo un libro, así que aporta al grupo mucho más que voces guturales.
– Ustedes dicen tocar Death Doom Metal, una categoría que encuentro apropiada. Los ritmos y riffs suenan a puro Doom, mientras la voz remite al Death. Me preguntaba por sus influencias y la música que escuchan hoy en día.
AM: Estamos influenciados por muchas bandas de Doom viejas, tales como My Dying Bride, Paradise Lost y Anathema. No obstante, el Death también es importante, y de hecho es mi principal influencia. Hablo de grupos como Autopsy, Morbid Angel, Death, Pestilence, etc. Consecration me hizo adentrarme mucho más en el Doom y disfruto de algunas bandas contemporáneas, tales como Daylight Dies, Evoken, Red Moon Architect, solo por nombrar algunas.
– ¿Qué podés contarnos acerca de la escena underground en Inglaterra? Por supuesto, hago esta pregunta con un foco en el estilo que ustedes tocan, pensando en la audiencia, otras bandas, lugares para tocar, sellos discográficos, etc.
AM: La audiencia no es muy grande para el estilo, pero existe. Hemos tocado por todo el país y siempre fuimos bien recibidos. Tocamos como teloneros de bandas importantes como Vallenfyre, Godthrymm y Esoteric, por ejemplo. Tengo la impresión de que se estaba generando algo interesante, hasta que la pandemia de Covid-19 detuvo todo. Hay muy buenos locales para tocar, pero nos preocupa que muchos de los más pequeños no logren sobrevivir financieramente tras este período de clausura y restricciones.
– ¿Cómo les está afectando la pandemia como banda y a nivel personal? ¿Qué planes tiene Consecration y hasta qué punto dependen de la evolución epidemiológica?
AM: La pandemia detuvo por completo la actividad de la banda. Teníamos un gran concierto programado con Creeping Flesh de Suecia y hubo que cancelarlo. Todos los shows están siendo suspendidos. Por suerte, hemos estado escribiendo el nuevo álbum y pudimos concentrarnos en que sea lo mejor que pueda ser. De hecho, estamos listos para ir al estudio próximamente. Tratamos de mantenernos productivos y creando contenido para las redes sociales. Personalmente, es un año muy raro para mí, pero para algunos viene siendo catastrófico. No creo que el año próximo mágicamente sea mucho mejor, solo podemos tener la esperanza.
– ¿Qué opinás sobre el live streaming? ¿Creés que es algo que en el futuro coexistirá con los shows presenciales?
AM: Posiblemente sigan, en especial, si tenemos en cuenta que muchas restricciones a los conciertos en vivo van a mantenerse, y hacer y ver cosas a distancia será más fácil. Creo que es algo bueno que demuestra el esfuerzo de las bandas para sobrevivir y hacer lo mejor posible en esta situación.
– ¿Y qué pensás sobre los protocolos que algunos grandes festivales ya están publicando, que incluyen el uso de máscaras y el distanciamiento social? ¿Qué hay de los shows en lugares pequeños? ¿Hay protocolos posibles, más aún, si tenemos en cuenta las características del público que escucha Metal?
AM: Está claro por qué son necesarios. El distanciamiento social va a ser muy difícil de imponer, particularmente cuando se trata de música muy pesada, a la que la gente responde físicamente. Los lugares más chicos son los que más van a sufrir, porque van a tener que ver cómo afrontar los gastos que hacen que un show sea viable. Habrá que seguir adelante y ver qué sucede.
– ¿Hay algo que te gustaría decirle a la gente en América Latina y España que todavía no escuchó Consecration?
AM: Si disfrutan del Death o Doom Metal de la vieja escuela, desolador, denle una escuchada a nuestro último disco y estén atentos al que viene: vamos a desplegar un mayor espectro de grises. El año pasado tocamos en Portugal como banda soporte de Alcest, así que sería grandioso poder tocar en España y Latinoamérica en un futuro próximo.