Haken, la aclamada banda británica de metal progresivo regresó el 24 de Julio, a través de InsideOut Music, con su sexto álbum, ”Virus”, uno que siempre tuvo la intención de enlazar con Vector del 2018. Cualquier similitud entre la actual pandemia y el título del álbum ¿es una coincidencia?, considerando el hecho de que este álbum fue escrito y grabado hacia finales de 2019, algunas de sus letras son extrañamente proféticas, pero puede que no se sienta así en el clima actual.

Habiendo trabajado en Virus durante sus giras europeas y de soporte de Devin Townsend en América del Norte, el baterista de Haken, Ray Hearne, revela:

“Desde el lanzamiento de The Mountain en 2013, se nos ha preguntado una y otra vez, por nuestra canción ”Cockroach King”, ¿quién es el Rey de las Cucarachas?. Esto es algo que también nos interesaba explorar más profundamente, así que esencialmente lo hicimos a través de nuestra música, elaborando y ampliando los temas interválicos, armónicos, rítmicos y líricos de esa canción. El resultado es un arco que se extiende a través de dos álbumes: Vector y Virus.

El tema de apertura del álbum “Prosthetic”, golpea como una ametralladora y capta inmediatamente tu atención desde el principio, chugs y riffs ardientes, patrones de batería que retumban y voces intrigantes, es un poderoso comienzo para 52 minutos y 11 pistas de delicada música artesanal, que extrae influencias de múltiples géneros.

”Invasion” continúa con los hermosos riffs, pulsantes y enigmáticos que no podrán evitar que la majestuosa entrega te atraiga. El tema más largo del álbum, ”Carousel” demuestra la versatilidad de la banda desde aplastantes riffs brutales a delicadas armonías y suaves segmentos casi etéreos. Más de diez minutos de duración, esto entiendo que es la esencia de Haken. No escriben música simple.

La cuarta canción, ”The Strain”, es al principio una de las pistas más accesibles y comerciales, aunque el tempo cambia, y las múltiples capas pronto cambian eso. Sigue claramente en el más claro pero más oscuro ”Canary Yellow”, las altas y complejas voces de Ross Jennings se entrelazan mientras la banda teje su hechizo.

Nos encontramos ahora con una historia dividida en cinco partes: ”Messiah Complex”; una canción compleja que es probable que sea vista como la joya del álbum. De 17 minutos de duración, “Messiah Complex” hace referencia explícita al material de la época de “The Mountain”.

La parte I: ”Ivory Tower” inicia con un riff de apertura muy inspirado en el post-rock, antes de pasar al riff completo del prog-rock (muy parecido a la canción ”Carry on Wayward Son”, del álbum Leftoverture (1976) de Kansas (puedes leer nuestra nota sobre el nuevo material de esta clásica banda aquí).

En la parte II, “A Glutton for Punishment”, ve a la banda soltarse, las voces combinadas se elevan sobre patrones más desafiantes y enfurecidos.

Con la parte III, ”Marigold”, contrasta dramáticamente, casi Opeth en estilo y entrega, aunque los segmentos de jazz incluídos en la parte IV: ”The Sect” llevan a la banda a una dimensión diferente, con una familiar, aunque retorcida repetición de una vocalización a cappella hablando aquí nuevamente sobre el Rey de las Cucarachas, para luego Ray Hearne convertirse en el centro de atención con su batería de ritmo explosivo.

La parte V: ”Ectobius Rex” (que es el latín de Cockroach King) continúa una vez más con los temas anteriores, reimaginando las melodías originales e incluyendo nuevas letras en la mezcla, a la vez que vuelve al motivo de la parte I: ”Ivory Tower” y repite la melodía de ”Prosthetic”.

Finalmente, la canción ”Only Stars” termina el álbum, así como el arco de Vector-Virus, en una nota sombría y atenuada. Es un buen final, pero considerando el hecho de que sólo dura dos minutos, parece un poco innecesaria y fuera de lugar, y algunos pueden sentir que el punto final debería haber sido sólo la parte V: ”Ectobius Rex”.

Por otro lado, la complejidad y el estilo en capas puede ser un desafío auditivo ya que a veces está casi sobrecargado. Estoy seguro de que los fans recomendarán escuchar primero Vector para proporcionar el vínculo natural.

La producción y la mezcla son una vez más entregadas por Adam “Nolly” Getgood (ex-bajista de Periphery), que produjo Virus y así como Vector, en el estudio Noise Creators (Fall Out Boy – Blink 182 – Misfits). Getgood, con un enfoque moderno y portátil de la producción musical, que a menudo desafía la sabiduría convencional, ha logrado crear un sonido tan progresivo como las bandas que graba. Mientras que los colaboradores de Haken desde hace mucho tiempo, Black Lake, diseñaron las imágenes y el arte de tapa con una bacteria viral negra sobre un llamativo fondo amarillo.

Haken, con su álbum ”Virus”, nos ha traído un impresionante disco lleno de calidad de principio a fin, bellamente producido para que puedas sumergirte completamente en esto de todo corazón.