Segunda cobertura de la noche. Luego de haber estado presente en Uniclub, donde el italiano Fabio Lione desempolvó canciones de todas las bandas en las que fue cantante, además de interpretar covers clásicos de bandas consagradas, me tomé un tiempo para bajar las revoluciones y descansar el cuerpo lleno de adrenalina y calor hasta que llegó la hora de partir hacia el barrio de Constitución.
La agrupación brasileña Losna iniciaba su segunda fecha en el país bajo el tour “Bitter Terror Argentina 2024”, habiendo previamente tocado en Primer Piso Bar, local ubicado en el barrio de Congreso de la Ciudad de Buenos Aires.
El trío brasileño, compuesto por las hermanas Fernanda Gomes (bajo y voz principal), Débora Gomes (guitarra y coros), y Mateus Michelon (batería), ejecuta un crudo death/thrash metal. Hasta la fecha, cuentan con cuatro discos de larga duración: “Wild Hallucinations” (2007), “Distilling Spirits” (2011), “Another Ophidian Extravaganza” (2015), y “Absinthic Wrangles” (2020).
Gracias a Alexander de Metal Eterno, por la invitación, me acerqué a Espacio Rincón, un coqueto lugar que, al llegar, me sorprendió porque no lucía muy “metalero”. Resulta que en el mismo sitio coexisten diferentes mundos: en la planta baja se podía ver a la gente bailando al ritmo de sonidos caribeños, mientras que, al subir un nivel y cruzar una puerta, se escuchaban guturales podridos.
Esos sonidos de ultratumba pertenecían a Darío, voz de la banda Rastro de Muerte, quienes lo acompañan son Carlos en batería, Néstor en guitarra, y David en el bajo. Lamentablemente, llegué cuando ya estaba en la mitad del set de los oriundos de Escobar. Para ese entonces, ya habían interpretado canciones como “Túneles de Sangre”, “Hervido en Brea” y la homónima “Rastro de Muerte”. Con un sonido muy bueno y una excelente interpretación por parte de cada uno de los músicos, los temas finales fueron “Falsos Profetas”, “Asfixiados” y cerraron con “Devorados”.
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Siendo casi las 2 de la madrugada, con el cansancio acumulado, no solo por la cobertura antes mencionada, sino también por un día laboral y haber participado en el banderazo que se le hizo al plantel de River Plate en la zona de Puerto Madero, además de disfrutar del triunfo del millonario sobre el rival de toda la vida en un nuevo superclásico, era el momento para escuchar la propuesta de los paulistas.
A pesar de la poca concurrencia, lamentablemente es preciso mencionar que la gente no apoya a las bandas under como lo hace con eventos de la talla de Iron Maiden, Metallica, y algún que otro festival “alternativo” donde se mezclan distintos géneros que nada tienen que ver con el metal. En este caso, el encuentro tenía ese “aroma” a show íntimo en una sala de ensayo por lo que se agradece a esas productoras que se arriesgan a organizar este tipo de fechas, donde no solo tocan bandas vernáculas, sino que también se traen agrupaciones del extranjero.
Con una considerable demora para ultimar detalles en la batería, que no estaba bien ajustada, y ordenar cada instrumento en su lugar, se pudo escuchar, mientras tanto, varios temas de “la mejor banda del mundo”, Iron Maiden, lo que hizo que la espera resultara mas amena.
Guitarras con riffs muy pesados, acompañadas por un bajo potente y una batería rabiosa, se sumaron al aura maligna que siempre ha encarnado a la banda, la cual permanece intacta y no decayó en toda la presentación. La voz de Fernanda y los coros de Débora son aún más agresivos en vivo. Interpretaron temas de todos sus discos, centrándose principalmente en el último larga duración, junto con algunos temas de los demos y singles que han lanzado recientemente. Entre otros, sonaron: “Street Fighters”, “Nosferatu”, “Back to the Grotto” y “Carmilla”.
De repente, Mateus pidió un instante, salió de la banqueta, recorrió el lugar e hizo una corta introducción con un bombo legüero en el centro de la pista. Una vez finalizado, inició un breve solo de batería de muy buena ejecución.
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Las canciones se fueron sucediendo con buena ejecución; la voz de Fernanda sonaba agresiva y poderosa, mientras los riffs ultra veloces ejecutados por su hermana Débora se sumaban con fuerza. La comunicación con el público fue justa y necesaria, siempre en portugués, pero dejándose entender. Llegó un cover de Morbid Angel, donde se armó un pequeño y simple pogo, demostrando que el sentimiento metalero va más allá de estar viendo a una banda en un estadio o en un pequeño espacio.
Un párrafo aparte para la ambientación, el sonido y las luces del lugar, todo bien organizado. Enhorabuena para los organizadores y quienes hicieron la logística. Con “Crossing The Bar”, “Tuchulcha” y “Amaro Sapore” se cerraría la presentación de una banda que lleva batallando más de 25 años, con algunos cambios de formación sobre sus espaldas, pero manteniendo toda esa esencia podrida del death metal.
Fue una larga jornada para este cronista, que lamentablemente no pudo estar presente en las performances de los chicos de Bodom Forever ni de Mastein, dos bandas tributo, una de ellas a Children of Bodom y la otra a Rammstein respectivamente, pero no faltará oportunidad.
Etiquetas: Bodom Forever, children of bodom, Death Metal, Espacio Rincon, Losna, Manstein, Metal Eterno Producciones, Rammstein, Rastro de Muerte, Thrash MetalSegunda cobertura de la noche. Luego de haber estado presente en Uniclub, donde el italiano Fabio Lione desempolvó canciones de todas las bandas en las que fue cantante, además de interpretar covers clásicos de bandas consagradas, me tomé un tiempo para bajar las revoluciones y descansar el cuerpo lleno de adrenalina y calor hasta que llegó la hora de partir hacia el barrio de Constitución.
La agrupación brasileña Losna iniciaba su segunda fecha en el país bajo el tour “Bitter Terror Argentina 2024”, habiendo previamente tocado en Primer Piso Bar, local ubicado en el barrio de Congreso de la Ciudad de Buenos Aires.
El trío brasileño, compuesto por las hermanas Fernanda Gomes (bajo y voz principal), Débora Gomes (guitarra y coros), y Mateus Michelon (batería), ejecuta un crudo death/thrash metal. Hasta la fecha, cuentan con cuatro discos de larga duración: “Wild Hallucinations” (2007), “Distilling Spirits” (2011), “Another Ophidian Extravaganza” (2015), y “Absinthic Wrangles” (2020).
Gracias a Alexander de Metal Eterno, por la invitación, me acerqué a Espacio Rincón, un coqueto lugar que, al llegar, me sorprendió porque no lucía muy “metalero”. Resulta que en el mismo sitio coexisten diferentes mundos: en la planta baja se podía ver a la gente bailando al ritmo de sonidos caribeños, mientras que, al subir un nivel y cruzar una puerta, se escuchaban guturales podridos.
Esos sonidos de ultratumba pertenecían a Darío, voz de la banda Rastro de Muerte, quienes lo acompañan son Carlos en batería, Néstor en guitarra, y David en el bajo. Lamentablemente, llegué cuando ya estaba en la mitad del set de los oriundos de Escobar. Para ese entonces, ya habían interpretado canciones como “Túneles de Sangre”, “Hervido en Brea” y la homónima “Rastro de Muerte”. Con un sonido muy bueno y una excelente interpretación por parte de cada uno de los músicos, los temas finales fueron “Falsos Profetas”, “Asfixiados” y cerraron con “Devorados”.
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Siendo casi las 2 de la madrugada, con el cansancio acumulado, no solo por la cobertura antes mencionada, sino también por un día laboral y haber participado en el banderazo que se le hizo al plantel de River Plate en la zona de Puerto Madero, además de disfrutar del triunfo del millonario sobre el rival de toda la vida en un nuevo superclásico, era el momento para escuchar la propuesta de los paulistas.
A pesar de la poca concurrencia, lamentablemente es preciso mencionar que la gente no apoya a las bandas under como lo hace con eventos de la talla de Iron Maiden, Metallica, y algún que otro festival “alternativo” donde se mezclan distintos géneros que nada tienen que ver con el metal. En este caso, el encuentro tenía ese “aroma” a show íntimo en una sala de ensayo por lo que se agradece a esas productoras que se arriesgan a organizar este tipo de fechas, donde no solo tocan bandas vernáculas, sino que también se traen agrupaciones del extranjero.
Con una considerable demora para ultimar detalles en la batería, que no estaba bien ajustada, y ordenar cada instrumento en su lugar, se pudo escuchar, mientras tanto, varios temas de “la mejor banda del mundo”, Iron Maiden, lo que hizo que la espera resultara mas amena.
Guitarras con riffs muy pesados, acompañadas por un bajo potente y una batería rabiosa, se sumaron al aura maligna que siempre ha encarnado a la banda, la cual permanece intacta y no decayó en toda la presentación. La voz de Fernanda y los coros de Débora son aún más agresivos en vivo. Interpretaron temas de todos sus discos, centrándose principalmente en el último larga duración, junto con algunos temas de los demos y singles que han lanzado recientemente. Entre otros, sonaron: “Street Fighters”, “Nosferatu”, “Back to the Grotto” y “Carmilla”.
De repente, Mateus pidió un instante, salió de la banqueta, recorrió el lugar e hizo una corta introducción con un bombo legüero en el centro de la pista. Una vez finalizado, inició un breve solo de batería de muy buena ejecución.
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Las canciones se fueron sucediendo con buena ejecución; la voz de Fernanda sonaba agresiva y poderosa, mientras los riffs ultra veloces ejecutados por su hermana Débora se sumaban con fuerza. La comunicación con el público fue justa y necesaria, siempre en portugués, pero dejándose entender. Llegó un cover de Morbid Angel, donde se armó un pequeño y simple pogo, demostrando que el sentimiento metalero va más allá de estar viendo a una banda en un estadio o en un pequeño espacio.
Un párrafo aparte para la ambientación, el sonido y las luces del lugar, todo bien organizado. Enhorabuena para los organizadores y quienes hicieron la logística. Con “Crossing The Bar”, “Tuchulcha” y “Amaro Sapore” se cerraría la presentación de una banda que lleva batallando más de 25 años, con algunos cambios de formación sobre sus espaldas, pero manteniendo toda esa esencia podrida del death metal.
Fue una larga jornada para este cronista, que lamentablemente no pudo estar presente en las performances de los chicos de Bodom Forever ni de Mastein, dos bandas tributo, una de ellas a Children of Bodom y la otra a Rammstein respectivamente, pero no faltará oportunidad.
Etiquetas: Bodom Forever, children of bodom, Death Metal, Espacio Rincon, Losna, Manstein, Metal Eterno Producciones, Rammstein, Rastro de Muerte, Thrash Metal