Un show anunciado con más de un año de anticipación y entradas agotadas en menos de dos semanas: así comenzó la larga espera para ver a Slipknot en vivo en el OVO Hydro de Glasgow, el 15 de diciembre, como parte de su gira del 25o aniversario de su álbum debut homónimo.
Un domingo frío, ventoso y lluvioso no iba a detenernos. Era una noche para viajar en el tiempo a 1999, el año en que Slipknot lanzó su primer disco. Máscaras, trajes rojos, caras pintadas y tres generaciones de fans formaban un mosaico único, unidos por una pasión común: disfrutar de una banda que hace 25 años impactó con su estilo agresivo tanto en discos como en escenarios.
A las 19:30, abrió la noche Bleed From Within, una banda local en ascenso. Con un público entregado y mosh pits constantes, interpretaron ocho canciones de su setlist, incluyendo “Hands of Sin”, “I Am Damnation” e “Into Nothing”. También presentaron “In Place of Your Halo”, con un invitado tocando la gaita en vivo. Después de más de una hora en el escenario, agradecieron al público y anunciaron un próximo show en Barrowlands, el recinto más icónico de Glasgow.
A las 21:00, la oscuridad envolvió el OVO Hydro, la bandera de Slipknot aparece como fondo del escenario y el logotipo de Slipknot que está en los amplificadores se ilumina de verde, mientras suena “Dream Weaver” de Gary Wright. Los primeros en salir al escenario son Sid Wilson y el único miembro que aún no se sabe quién es pero se lo llama Samples Media o Greg Bones, quienes arrancan con el track introductorio del álbum Slipknot, “742617000027”.
Sin pausa alguna, empiezan a tocar “(sic)”, y mi plan de tener una noche tranquila sin irme hacia la valla o formar parte del pit, se fue por la ventana y ya para cuando empieza a sonar “Eyeless”, estoy a tan solo unos metros del escenario con el señor Shawn “Clown” Crahan casi enfrente mío. Es en este momento en el cual Corey Taylor nos da la bienvenida y nos cuenta que esta noche no va a haber una sola canción posterior a 1999, lo que me llevó de vuelta a mis 14 años, recordándome del momento en que me compré su primer álbum y el impacto que tuvo en mi vida.
“Wait and Bleed” suena mucho más temprano de lo que me esperaba, ya que me imaginé que sería parte del encore, pero no importa en qué posición del set list estuvo, no desperdicié la oportunidad de saltar al mosh pit mientras iba cantando a la par de Corey al igual que todos los que allí estábamos. Después de “Get This” (canción que originalmente fue lanzada únicamente para la versión de digipak del disco, junto con “Me Inside”) y “Eeyore”, la banda se retira del escenario excepto por Sid quien se queda tocando un remix de “Tattered & Torn” junto con Samples Media, lo que a la vez nos permite tomar un respiro de lo que viene siendo la noche hasta ahora.
La pausa terminó con Me Inside y Liberate, donde el mosh alcanzó un nuevo nivel de intensidad. Sid volvió con “Frail Limb Nursery”, seguido de “Purity”, “Prosthetics, No Life y Only One. La banda se despidió elogiando a Bleed From Within, pero el público no se rendía, coreando el clásico cántico escocés: “Here we, here we, here we fucking go”.
Sid reapareció para iniciar “Mudslide”, y el punto álgido llegó con Spit It Out. Aunque mis casi 40 años ya pesaban, no resistí: corrí al mosh pit más grande de la noche. Cerraron con Surfacing y una versión extendida de “Scissors”, donde Eloy Casagrande demostró por qué es el baterista perfecto para Slipknot.
La fiesta terminó, y aunque deseamos que nunca acabara, haber vivido un show dedicado íntegramente al álbum debut de Slipknot es algo que nunca olvidaremos. Keep on headbanging, you motherfuckers!
Etiquetas: Bleed From Within, Escocia, Glasgow, Metal Alternativo, Nu Metal, slipknotUn show anunciado con más de un año de anticipación y entradas agotadas en menos de dos semanas: así comenzó la larga espera para ver a Slipknot en vivo en el OVO Hydro de Glasgow, el 15 de diciembre, como parte de su gira del 25o aniversario de su álbum debut homónimo.
Un domingo frío, ventoso y lluvioso no iba a detenernos. Era una noche para viajar en el tiempo a 1999, el año en que Slipknot lanzó su primer disco. Máscaras, trajes rojos, caras pintadas y tres generaciones de fans formaban un mosaico único, unidos por una pasión común: disfrutar de una banda que hace 25 años impactó con su estilo agresivo tanto en discos como en escenarios.
A las 19:30, abrió la noche Bleed From Within, una banda local en ascenso. Con un público entregado y mosh pits constantes, interpretaron ocho canciones de su setlist, incluyendo “Hands of Sin”, “I Am Damnation” e “Into Nothing”. También presentaron “In Place of Your Halo”, con un invitado tocando la gaita en vivo. Después de más de una hora en el escenario, agradecieron al público y anunciaron un próximo show en Barrowlands, el recinto más icónico de Glasgow.
A las 21:00, la oscuridad envolvió el OVO Hydro, la bandera de Slipknot aparece como fondo del escenario y el logotipo de Slipknot que está en los amplificadores se ilumina de verde, mientras suena “Dream Weaver” de Gary Wright. Los primeros en salir al escenario son Sid Wilson y el único miembro que aún no se sabe quién es pero se lo llama Samples Media o Greg Bones, quienes arrancan con el track introductorio del álbum Slipknot, “742617000027”.
Sin pausa alguna, empiezan a tocar “(sic)”, y mi plan de tener una noche tranquila sin irme hacia la valla o formar parte del pit, se fue por la ventana y ya para cuando empieza a sonar “Eyeless”, estoy a tan solo unos metros del escenario con el señor Shawn “Clown” Crahan casi enfrente mío. Es en este momento en el cual Corey Taylor nos da la bienvenida y nos cuenta que esta noche no va a haber una sola canción posterior a 1999, lo que me llevó de vuelta a mis 14 años, recordándome del momento en que me compré su primer álbum y el impacto que tuvo en mi vida.
“Wait and Bleed” suena mucho más temprano de lo que me esperaba, ya que me imaginé que sería parte del encore, pero no importa en qué posición del set list estuvo, no desperdicié la oportunidad de saltar al mosh pit mientras iba cantando a la par de Corey al igual que todos los que allí estábamos. Después de “Get This” (canción que originalmente fue lanzada únicamente para la versión de digipak del disco, junto con “Me Inside”) y “Eeyore”, la banda se retira del escenario excepto por Sid quien se queda tocando un remix de “Tattered & Torn” junto con Samples Media, lo que a la vez nos permite tomar un respiro de lo que viene siendo la noche hasta ahora.
La pausa terminó con Me Inside y Liberate, donde el mosh alcanzó un nuevo nivel de intensidad. Sid volvió con “Frail Limb Nursery”, seguido de “Purity”, “Prosthetics, No Life y Only One. La banda se despidió elogiando a Bleed From Within, pero el público no se rendía, coreando el clásico cántico escocés: “Here we, here we, here we fucking go”.
Sid reapareció para iniciar “Mudslide”, y el punto álgido llegó con Spit It Out. Aunque mis casi 40 años ya pesaban, no resistí: corrí al mosh pit más grande de la noche. Cerraron con Surfacing y una versión extendida de “Scissors”, donde Eloy Casagrande demostró por qué es el baterista perfecto para Slipknot.
La fiesta terminó, y aunque deseamos que nunca acabara, haber vivido un show dedicado íntegramente al álbum debut de Slipknot es algo que nunca olvidaremos. Keep on headbanging, you motherfuckers!
Etiquetas: Bleed From Within, Escocia, Glasgow, Metal Alternativo, Nu Metal, slipknot